Agencias
Según el informe de la Fiscalía de Albertville, Francia, el día de su accidente (29 de diciembre), Michael Schumacher esquió en una zona de dificultad (zona roja) y, pese a ser un esquiador experimentado, uno de sus esquís chocó con una piedra que sobresalía en el terreno, lo cual lo llevó a caer ocho metros fuera de la pista y después pegarse en la cabeza con una roca, lo cual lo llevó a un estado de coma inducido en el que todavía se encuentra.
Los resultados de la investigación se basaron en una serie de peritajes realizados en Meribel - la región donde se econtraba esquiando -, así como en un video de dos minutos que tomó la cámara instalada en el casco que portaba Schumacher, el Rey de la Fórmula 1 que ganó el campeonato mundial en siete ocasiones.
De acuerdo con las autoridades, la pista se encontraba en perfectas condiciones y cumplía con todos los estándares necesarios. Asimismo, aseguraron que "Schumi" nunca intentó salvar a ninguna persona durante su descenso, como lo dijeron algunos medios alemanes en los días pasados.
Respecto a la velocidad exacta, el fiscal Patrick Quincy señaló que no fue posible determinarla a través del video. En este sentido, el investigador Stephane Bozon y el teniente coronel Benoit Vinneman coincidieron en que el expiloto no realizó maniobras imprudentes, pues "su velocidad era completamente normal para un buen esquiador".
Quincy informó que aún falta revisar a detalle cada imagen captada en el video y afirmó que la investigación no tiene una fecha límite para concluir, ya que no se busca culpar a alguien, simplemente se intenta averiguar qué fue lo que sucedió.
Con información de Reuters, Notimex y AP