La historia del cine —y las revistas sensacionalistas— ha registrado varias películas que, ya sea por el tema, la irreverencia con la que tratan ciertos asuntos, porque se filman en un lugar «impropio» o por las acciones de alguno de los protagonistas, se han cubierto con el velo de la fatalidad. Aclaremos que, en esto de las leyendas, poco puede probarse histórica o científicamente, así que muchos de los hechos aquí presentados pueden ser sólo rumores, pero, con todo… ¿a poco no resultan muuuy interesantes?
10. The Misfits. «Marilyn casi me provoca un ataque al corazón…» Tales fueron las proféticas palabras de “El rey” Clark Gable al finalizar el rodaje de esta película, ya que murió víctima de un ataque al corazón dos meses antes del estreno. Además, también sería el último filme que completaría Monroe, que moriría de una sobredosis al año siguiente, así como el inicio del declive emocional que acarrearía la muerte del gran Montgomery Clift.
The Misfits (1961). Dir. John Huston, con Clark Gable, Marilyn Monroe y Montgomery Clift.
9. Rebel Without a Cause. Aquí sí ninguno de los «rebeldes» protagonistas se salvó: con tan sólo 24 años de edad, James Dean se estrelló en su Porsche maldito, el “Little Bastard” —que, según dicen por ahí, siguió matando a sus posteriores dueños—; Natalie Wood se ahogó al caer de su propio yate, en circunstancias bastante inusuales; y Sal Mineo fue asesinado a puñaladas afuera de su departamento por un asaltante…
Rebel Without a Cause (1955). Dir. Nicholas Ray, con James Dean, Natalie Wood y Sal Mieno.
8. Twilight Zone: The Movie. En la madrugada del 23 de julio de 1982, el actor Vic Morrow y dos jóvenes actores asiáticos, Renée Chen y My-ca Dinh Le, murieron cuando filmaban una escena —supuestamente en Vietnam— en la que Morrow es perseguido por un helicóptero mientras rescata a dos niños vietnamitas. Una explosión hizo que la aeronave se estrellara sobre ellos, debido a lo cual murieron instantáneamente.
Twilight Zone: The Movie (1983). Dir. Joe Dante, John Landis, George Miller y Steven Spielberg, con Dan Aykroyd, Albert Brooks y Vic Morrow.
7. Superman. Al parecer, “El Hombre de Acero” ha traído infortunios a muchos de quienes se han involucrado con él. La sombra de esta maldición alcanzó, entre otros, a la actriz Margot Kidder —Lois Lane—, quien era bipolar y terminó vagando desnuda por las calles, y a Christopher Reeve, que quedó paralizado a raíz de un accidente hípico y luchó como un titán hasta su muerte en 2004.
Superman (1978). Dir. Richard Donner, con Marlon Brando, Gene Hackman y Christopher Reeve.
6. Game of Death. “El Dragón” Bruce Lee filmó treinta minutos de esta cinta en 1972, y suspendió la filmación para trabajar en Operación Dragón (1973), pero la muerte le impediría regresar al set. Lo curioso es que, en esta película —en la que combate a las triadas, o sea, la mafia de Hong Kong— Bruce finge su propia muerte con una bala real que se cuela entre la utilería y se estrella en su pecho… ¿Les suena conocido?
Game of Death (1978). Dir. Robert Clouse, con Bruce Lee, Colleen Camp y Dean Jagger.
5. The Crow. Más que una película maldita —que, sin embargo, coquetea con lo sobrenatural—, El cuervo sería parte de una maldición familiar: dieciséis años antes de la muerte de Brandon Lee, causada por el impacto de una bala de salva defectuosa, el mundo se conmocionó con el deceso de su padre, el estrella de las artes marciales Bruce Lee. Por cierto, al contrario de lo que comúnmente se dice, la escena en que Brandon murió NO aparece en la edición final.
The Crow (1994). Dir. Alex Proyas, con Brandon Lee, Rochelle Davis y Ernie Hudson.
4. La Profecía. Al parecer, el Anticristo quería evitar la filmación de esta película: los aviones en que viajaban Gregory Peck y el guionista David Seltzer, por separado, fueron alcanzados por relámpagos; el hotel donde se hospedaba el director fue bombardeado por el ERI; luego, Peck canceló una reservación en un avión que acabaría estrellándose y el guardia del zoológico donde se filmó una escena fue asesinado por un león…
The Omen (1976). Dir. Richard Donner, con Gregory Peck, Lee Remick y David Warner.
3. El exorcista. El saldo de la influencia demoníaca, según fuentes no autorizadas, asciende a: nueve miembros del staff muertos durante los siete meses de rodaje, dos actores que murieron antes del estreno de la cinta y un misterioso e inexplicable incendio que destruyó parte del set durante un fin de semana. Y eso, sin contar que el papel de Regan fue un estigma que casi le cuesta la carrera —y la vida— a la pobre Linda Blair.
The Exorcist (1973). Dir. William Friedkin, con Ellen Burstyn, Max von Sydow y Lee J. Cobb.
2. Poltergeist. Según dicen, “La maldición de Poltergiest” se originó porque se utilizaron esqueletos reales en escena de la piscina, lo que provocó la ira de sus espíritus, que se descargó, entre otros, sobre la actriz Dominique Dunne, quien murió estrangulada a manos de su novio, y sobre la pequeña Heather O’Rourke, que falleció súbitamente a la edad de 12 años a causa de una penosa afección estomacal.
Poltergeist (1982). Dir. Tobe Hooper, con Craig T. Nelson, JoBeth Williams y Beatrice Straight.
1. El bebé de Rosemary. La leyenda que envuelve a la historia de la joven y espigada esposa que, sin saberlo, alberga en su seno al hijo del Príncipe de las Tinieblas, tiene largas ramificaciones. Se dice que, para realizarla, Polanski hizo investigaciones sobre la demonología y los cultos satánicos y que, incluso, tuvo como asesor nada menos que al sumo sacerdote de la Iglesia de Satán, Antón LaVey. Hay quienes creen que la relación con los ministerios del mal fue lo que provocó que, un año después del estreno, Sharon Tate —esposa de Polanski que, a la sazón, estaba embarazada— fuera asesinada en su casa de Beverly Hills por el clan de Charles Manson, en medio de un ritual de tintes satánicos.
Otros, más imaginativos, sostienen que Polanski hizo un pacto con el Maligno y ofreció a su esposa en sacrificio. También se habla del accidente automovilístico en que murió el compositor del score, el polaco Krzysztof Komeda. Lo cierto es que ciertas escrituras en las paredes de la mansión Polanski aludían a dos canciones de The Beatles; y qué curioso que, once años después, John Lennon fuera asesinado a las puertas del edificio Dakota, donde vivía, y que es el mismo donde Rosemary concibe y cría a la “semilla del mal”… ¿Pura coincidencia?
Rosemary’s Baby (1968). Dir. Roman Polanski, con Mia Farrow, John Cassavetes y Ruth Gordon.