La economía de Querétaro ha evolucionado de manera importante en los últimos cuatro sexenios, el aumento de la inversión y el crecimiento industrial se encuentran como una constante pese al cambio de partido en el poder.
Ello en parte obedece al imparable proceso de industrialización que ha vivido la entidad desde la década de los setenta ante la necesidad de descentralizar la industria de la zona metropolitana de la ciudad de México.
En los últimos cuatro sexenios se observan importantes tasas de crecimiento de la economía, en todos los casos superiores a los de la economía del país, si bien todos muestran distintos matices en sus políticas económicas, en general se ha buscado un alto nivel de competitividad y atracción de capitales externos.
El crecimiento más acelerado se encuentra en el periodo 2009-2015 ya que se calcula que en este periodo el PIB de la entidad alcance un aumento en promedio anual de 5.7 por ciento, casi un punto más que en el sexenio 2003-2009, cuando el PIB creció 4.7 por ciento, asimismo superaría el avance de 3.9 por ciento anual en el periodo 1997-2003 y al 4 por ciento anual registrado en el sexenio 1991-1997.
Lo anterior se desprende de una investigación de EL FINANCIERO BAJÍO, con base en las cifras disponibles del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, de la Secretaría de Economía y de los anexos estadísticos de informes presidenciales y estatales.
La fuerte dinámica de Querétaro responde a los altos niveles de inversión, especialmente la extranjera que ha llegado a niveles históricos en la entidad. En los primeros cinco años del actual sexenio queretano las inversiones acumuladas suman 2 mil 743 millones de dólares, lo que significa 67 por ciento más que la realizada en el sexenio pasado cuando sumaron mil 635.6 millones de dólares, según las cifras de la Secretaría de Economía.
Asimismo las inversiones recientes son 3.3 veces mayores a las realizadas en el sexenio 1997-2003.
A lo largo de los cuatro sexenios se ha acumulado un total de mil 321 empresas con inversión extranjera directa en la entidad, de las cuales 503 pertenecen a inversionistas de Estados Unidos, 157 a empresarios de España, 139 son de Alemania, 66 de Canadá, 56 de Francia, 48 de Corea, 47 de Italia, 44 de Países Bajos (Holanda), 35 de Japón y 19 de Colombia.
Las inversiones han permitido la conformación del más moderno clúster aeroespacial en el país, un sector líder en la producción de autopartes, la instalación de centros de datos de importantes corporaciones, así como modernas productoras de electrodomésticos, entre muchas otras.
Dentro del aparato industrial queretano resalta el dinamismo de la industria manufacturera, la cual ha generado un importante efecto multiplicador en la entidad.
En este último sexenio, se calcula que el crecimiento del PIB manufacturero podría ser de 9.6 por ciento en promedio anual, superando por mucho el crecimiento de uno por ciento en promedio del sexenio 2003-2009, afectado este último periodo por la recesión mundial y nacional del 2009. También rebasaría el aumento de 7.4 por ciento mostrado en la administración 1997-2003.
La industria manufacturera ha fortalecido el empleo formal en la entidad y se observa que el crecimiento más importante se ha dado en el actual sexenio 2009-2015 con una tasa de 7.7 por ciento anual, esto conforme a las cifras de trabajadores asegurados en el IMSS, en importancia sigue el aumento de 4.7 por ciento en el sexenio 1991-1997 y el alza de 4.4 por ciento del 2003-2009, en tanto que en el periodo sexenal 1997-2003 el incremento fue de 2.1 por ciento anual en el empleo formal.
La evolución económica de Querétaro a lo largo de los últimos cuatro sexenios ha permitido que la entidad en la actualidad se coloque en tercer lugar nacional por su tasa de crecimiento y en el lugar 16 por el valor de su PIB, asimismo ha alcanzado el sexto más alto PIB per cápita del país con un promedio de 14 mil 75 dólares, esto es 3 mil 360 dólares más que el promedio nacional.
El costo del crecimiento industrial ha sido un constante crecimiento urbano y poblacional que han tenido entre otras consecuencias una alta inflación en la entidad queretana, sin embargo ésta se ha ido alineando a la tendencia general de los precios en el país, pues si bien en los últimos dos años del sexenio 1991-1997 –cifras disponibles solo para esos años-, la inflación se fue a tasas de dos dígitos promediando 21.3 por ciento anual, para el siguiente periodo 1997-2003 la tasa promedio fue de 9.3 por ciento y para 2003-2009 el incremento anual de los precios se ubicó en 5.1 por ciento, y en los primeros cinco años de la actual administración la inflación promedia 4.07 por ciento anual en Querétaro, muy similar al promedio nacional de 3.96 por ciento en ese lapso.
