En el arranque de 2019 se reanimaron las compras de vehículos ligeros en los estados del Bajío, luego de reportar prácticamente todo un año con cifras a la baja.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), en enero fueron comprados en Aguascalientes mil 699 vehículos, lo que significó un incremento anualizado de 19.1 por ciento, el mayor entre todas las entidades del país.
Mientras, en Guanajuato se reportaron 4 mil 496 vehículos adquiridos, lo que representa un aumento de 0.1 por ciento y, en Querétaro se registraron 2 mil 665 unidades, un avance de 0.7 por ciento en el lapso.
En San Luis Potosí se compraron 2 mil 418 unidades en enero, lo que significa un crecimiento de 1.9 por ciento respecto al mismo mes del año anterior.
A nivel nacional se reportaron 111 mil 216 vehículos ligeros adquiridos, lo que implica un crecimiento anual de 1.8 por ciento.
Respecto a su posición entre los estados del país con el mayor número de compradores reportados por la AMDA, Guanajuato se colocó en el sexto sitio; Querétaro y San Luis Potosí, en el 13 y 15, respectivamente; y, Aguascalientes en el 20.
En los primeros lugares se ubicaron la Ciudad de México, con 16 mil 828 vehículos; el estado de México, con 12 mil 182, y Nuevo León, con 8 mil 876 unidades.
La AMDA indicó que si bien en el primer mes del año se logró un resultado positivo en la venta de vehículos ligeros, de las ocho marcas líderes del mercado mexicano, que en conjunto representan 80 por ciento de las ventas, sólo dos reportaron avance positivo: KIA, con 1 por ciento y GM, con 106.9 por ciento.
El director general adjunto de la AMDA, Guillermo Rosales Zárate, comentó con anterioridad, que el resultado total para enero estuvo influido por una baja base de comparación de GM respecto a enero de 2018, debido al cambio en el método de registro implementado por la marca en su momento.
Otro factor que influyó en el resultado del primer mes de 2019, fueron las ventas retrasadas en la franja fronteriza durante los últimos meses del año pasado, por la espera del programa de estímulo fiscal anunciado por el nuevo gobierno para disminuir la tasa del Impuesto al Valor Agregado.