Historias de NegoCEOs

Carlos Romero Deschamps, el imperturbable líder petrolero

Muy pocas cosas le quitan el sueño a Carlos Romero Deschamps y entre estas no están la reforma energética, las leyes secundarias, el ‘Pemexproa’, el nuevo sistema de pensiones para los trabajadores de la paraestatal o incluso el reciente revés legal en Estados Unidos que podría costarle unos mil 500 millones de dólares al sindicato que dirige. Ninguno de estos temas son capaces de sacudir por completo al líder petrolero de 71 años, de acuerdo con personas que han convivido intermitentemente con él y su equipo en los últimos meses. Es por eso que el líder del sindicato más grande de México se mueve con soltura donde quiera que va. Ya sea en el lujoso restaurante The Palm, en Polanco, o la cantina Chuchilleros, a una calle de la nueva sede del Senado de la República (recinto donde ocupa uno de los 52 escaños que tiene el PRI en la Cámara Alta), el tamaulipeco se deja ver sin recato. Aprovecha las comidas para recibir ‘invitados’; escucha propuestas y gira instrucciones a sus subalternos. Gesticula con las manos mientras habla, suelta dos o tres vituperios por cada oración y suele combinar su comida con tragos de vino tinto y whisky mezclado con agua mineral. Antes de sentarse a la mesa, sus subordinados piden a los ‘invitados’ apagar sus teléfonos celulares y guardarlos en sus bolsillos. Y entonces sí, el líder petrolero, quien por más de 18 años ha estado al frente de los trabajadores de la empresa más grande de México, está dispuesto a hablar de negocios, sobre todo de aquellos que tienen que ver con los 140 mil afiliados que aglutina Pemex. Y como sabe que el tiempo es dinero (según una investigación de la periodista Fátima Monterrosa, publicada en el semanario Emeequis, Deschamps recibe cada hora cerca de 50 mil pesos sólo para gastos de viaje, apoyo económico y cuotas sindicales) no demora mucho tiempo en la mesa. Así que luego de mirar su Audemars Piguet Royal Oak de 40 mil dólares, en el que constata que cada minuto vale oro, decide que tiene que irse. Da una o dos instrucciones finales a su gente y el negocio quedó finalizado. Así se desenvuelve el líder petrolero de acuerdo con fuentes de alto nivel que han estado presentes de las reuniones del líder del sindicato petrolero y que accedieron a contarme algunos detalles. Pero no es que el way of life de Deschamps sea desconocido o poco retratado por los medios; todo lo contrario: diarios como Reforma, Tabasco Hoy, AM y el periodista Carlos Loret de Mola han exhibido muchas de sus extravagancias: que si va a las Vegas a apostar cientos o miles de dólares… que si viaja en jets privados junto con su hija, quien presume bolsas Louis Vuitton de 40 mil pesos y degusta vinos Vega Sicilia de más de 10 mil pesos por botella… que si su hijo parte el aire en Miami abordo de un Ferrari Enzo de 3 millones de dólares o de un Lamborghini Aventador… que si tiene dos o tres departamentos de 2.5 millones de dólares en Estados Unidos… que si posee tres yates con nombres estrafalarios: El Indomable, el Guly y el Güero, cada uno con un valor aproximado de entre 1.5 y 2 millones de dólares… que si ostenta un departamento en Residencial del Mar, una exclusiva zona de Cancún, y así una lista interminable de extravagancias a las que, según se ha publicado, tiene acceso quien inició su carrera como chofer de Joaquín Hernández Galicía, alias ‘La Quina’, su antecesor al frente del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM). Lo cierto es que a Deschamps aún le quedan poco más de tres años al frente del sindicato petrolero. ¿Le tocará ver la ‘transformación’ del sector energético y de Pemex? No importa: él ya tiene un sucesor. Posdata 1.Carlos Romero Deschamps tiene prácticamente resuelta su salida de la dirigencia del STPRM. Su segundo de abordo es el actual secretario general la Sección 34 del STPRM, quien se perfila para relevarlo en el 2018, cuando vence su periodo al frente del sindicato. Posdata 2.Carlos Romero Deschamps no es el CEO de una gran empresa petrolera como la británica Shell, ni es el dueño de un conglomerado de empresas, como Carlos Slim, y tampoco forma parte del jet set de empresarios y figuras públicas que integran las listas de multimillonarios de Bloomberg y Forbes. El líder petrolero, acaso, es un hombre con suerte… y con muy buenos amigos.Escríbeme a mmaldonado@elfinanciero.com.mx y a @MarioMalAquí puedes seguir todos mis textos: Historias de NegoCEOs

Muy pocas cosas le quitan el sueño a Carlos Romero Deschamps y entre estas no están la reforma energética, las leyes secundarias, el 'Pemexproa', el nuevo sistema de pensiones para los trabajadores de la paraestatal o incluso el reciente revés legal en Estados Unidos que podría costarle unos mil 500 millones de dólares al sindicato que dirige. Ninguno de estos temas son capaces de sacudir por completo al líder petrolero de 71 años, de acuerdo con personas que han convivido intermitentemente con él y su equipo en los últimos meses.

Es por eso que el líder del sindicato más grande de México se mueve con soltura donde quiera que va. Ya sea en el lujoso restaurante The Palm, en Polanco, o la cantina Chuchilleros, a una calle de la nueva sede del Senado de la República (recinto donde ocupa uno de los 52 escaños que tiene el PRI en la Cámara Alta), el tamaulipeco se deja ver sin recato. Aprovecha las comidas para recibir 'invitados'; escucha propuestas y gira instrucciones a sus subalternos. Gesticula con las manos mientras habla, suelta dos o tres vituperios por cada oración y suele combinar su comida con tragos de vino tinto y whisky mezclado con agua mineral.

Antes de sentarse a la mesa, sus subordinados piden a los 'invitados' apagar sus teléfonos celulares y guardarlos en sus bolsillos. Y entonces sí, el líder petrolero, quien por más de 18 años ha estado al frente de los trabajadores de la empresa más grande de México, está dispuesto a hablar de negocios, sobre todo de aquellos que tienen que ver con los 140 mil afiliados que aglutina Pemex.

Y como sabe que el tiempo es dinero (según una investigación de la periodista Fátima Monterrosa, publicada en el semanario Emeequis, Deschamps recibe cada hora cerca de 50 mil pesos sólo para gastos de viaje, apoyo económico y cuotas sindicales) no demora mucho tiempo en la mesa. Así que luego de mirar su Audemars Piguet Royal Oak de 40 mil dólares, en el que constata que cada minuto vale oro, decide que tiene que irse. Da una o dos instrucciones finales a su gente y el negocio quedó finalizado.

Así se desenvuelve el líder petrolero de acuerdo con fuentes de alto nivel que han estado presentes de las reuniones del líder del sindicato petrolero y que accedieron a contarme algunos detalles.

Pero no es que el way of life de Deschamps sea desconocido o poco retratado por los medios; todo lo contrario: diarios como Reforma, Tabasco Hoy, AM y el periodista Carlos Loret de Mola han exhibido muchas de sus extravagancias: que si va a las Vegas a apostar cientos o miles de dólares… que si viaja en jets privados junto con su hija, quien presume bolsas Louis Vuitton de 40 mil pesos y degusta vinos Vega Sicilia de más de 10 mil pesos por botella… que si su hijo parte el aire en Miami abordo de un Ferrari Enzo de 3 millones de dólares o de un Lamborghini Aventador… que si tiene dos o tres departamentos de 2.5 millones de dólares en Estados Unidos… que si posee tres yates con nombres estrafalarios: El Indomable, el Guly y el Güero, cada uno con un valor aproximado de entre 1.5 y 2 millones de dólares… que si ostenta un departamento en Residencial del Mar, una exclusiva zona de Cancún, y así una lista interminable de extravagancias a las que, según se ha publicado, tiene acceso quien inició su carrera como chofer de Joaquín Hernández Galicía, alias 'La Quina', su antecesor al frente del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).

Lo cierto es que a Deschamps aún le quedan poco más de tres años al frente del sindicato petrolero. ¿Le tocará ver la 'transformación' del sector energético y de Pemex? No importa: él ya tiene un sucesor.

Posdata 1.
Carlos Romero Deschamps tiene prácticamente resuelta su salida de la dirigencia del STPRM. Su segundo de abordo es el actual secretario general la Sección 34 del STPRM, quien se perfila para relevarlo en el 2018, cuando vence su periodo al frente del sindicato.

Posdata 2.
Carlos Romero Deschamps no es el CEO de una gran empresa petrolera como la británica Shell, ni es el dueño de un conglomerado de empresas, como Carlos Slim, y tampoco forma parte del jet set de empresarios y figuras públicas que integran las listas de multimillonarios de Bloomberg y Forbes. El líder petrolero, acaso, es un hombre con suerte… y con muy buenos amigos.

Escríbeme a mmaldonado@elfinanciero.com.mx y a @MarioMal

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