El Océano Atlántico ha provocado dos tormentas tropicales en rápida sucesión después de pasar más de un mes en calma, mientras el corazón de la temporada de huracanes comienza a latir.
La tormenta tropical ‘Danielle’ se formó el jueves y ahora se mueve a unos mil 472 kilómetro) al oeste de las Azores en el Atlántico central, con vientos de 70 mph, dijo el sábado el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
El segundo sistema, la tormenta tropical Earl, se encuentra a unas 115 millas al este-noreste de las Islas de Sotavento del Caribe con vientos de 40 mph. Ambas tormentas están lejos de tierra y ninguna representa una amenaza inmediata para la vida o la propiedad.
Las tormentas vienen después de que el Atlántico se mantuvo en calma durante agosto; el mes transcurrió sin tormentas tropicales ni huracanes por primera vez desde 1997. La temporada de huracanes del Atlántico de seis meses comienza el 1 de junio, pero el momento más activo suele ocurrir entre mediados de agosto y principios de octubre.
Las tormentas del Atlántico se vigilan de cerca porque, si se desplazan hacia el Golfo de México, pueden interrumpir la producción y el suministro de gas natural y petróleo, además de afectar la agricultura.
Ya se han formado cinco tormentas esta temporada, una marca que generalmente se alcanza el 22 de agosto. Solo una de ellas, ‘Danielle’, alcanzó brevemente la fuerza de un huracán. En la mayoría de los años, se han formado dos huracanes en el Atlántico a principios de septiembre.
Además de las tormentas del Atlántico, los meteorólogos están rastreando el tifón Hinnamnor, que está azotando las islas del sur de Japón y provocando cancelaciones de vuelos. Se espera que el tifón azote Corea del Sur a principios de la próxima semana.