HOUSTON, Texas.- El número de pacientes con COVID-19 en los hospitales de Texas se está acelerando más rápido que en cualquier otro punto de Estados Unidos a medida que la variante Delta se propaga sin control, principalmente entre los no vacunados.
Hasta el martes por la tarde, 9 mil 210 texanos fueron hospitalizados con COVID-19. En algunas partes del estado, el número de pacientes con coronavirus en los hospitales amenaza con superar los picos pasados.
A pesar de que el número de casos de coronavirus ha aumentado en Texas, el gobernador Greg Abbott se ha mantenido firme en su oposición a los mandatos de vacunas o cubrebocas, argumentando que violan el derecho de los pueblos a la libertad individual, contradiciéndose lo que dijo al principio de la pandemia de que “cada autoridad local deberá de dictar las medidas de mitigación, y cada ciudad tiene diferentes necesidades; eso es la democracia” dijo en una entrevista televisiva.
Los hospitales en Texas están luchando para contratar enfermeras, ya que el aumento de las tasas de hospitalización aumenta tanto la demanda como el costo de pagarles a ellos y a otros trabajadores de atención médica temporales; en Laredo, no se puede extender el número de camas y Hospitales COVID por la falta de personal de atención como enfermera y ayudantes médicos.
“En nombre de los hospitales en el estado de Texas, lo que necesitamos es tener un enfoque organizado y consistente que no enfrente a los hospitales entre sí en la búsqueda de personal”, dijo Marc Boom, presidente de la Asociación de Hospitales de Texas, en una audiencia con los legisladores estatales donde estuvo presente la senadora estatal Lois Kolkhorst, presidenta del Comité Senatorial de Salud y Servicios Humanos.
Finalmente, el personal de salud que labora en los hospitales de Texas temen que el número de contagiados se desborde en las próximas semanas y no haya cupo en ningún hospital para los enfermos.