Laura Osorio es una de las viajeras que transitan diariamente entre Phoenix y Tucson en Arizona a fin de llevar a cabo sus actividades laborales por lo que el uso de la carretera I-10 es común para ella.
“La ida y el regreso siempre son un problema y a veces, aunque suene exagerado, son horas a las semanas las que pierdo en la carretera por el cuello de botella que se hace,” narró la residente de Tucson.
Osorio no está sola ya que se estima que más de 50 mil vehículos circulan diariamente por esta autopista entre las dos ciudades más grandes del estado. Durante las horas pico de la mañana y la tarde, el tráfico suele ralentizarse muy por debajo del límite de velocidad.
A fin de remediar esta situación, el gobierno de Arizona pretende invertir 400 millones de dólares para la expansión de un tramo de la Interestatal 10 (I-10), beneficiando no solo a los viajeros, sino también al comercio.
De acuerdo con el presupuesto para el año fiscal 2023 del gobernador Doug Ducey, el Estado propone invertir fondos para acelerar la expansión del I-10 en un tramo de 25 millas entre Phoenix y Tucson y aumentar la vialidad de dos a tres carriles.
“La aceleración del proyecto de la I-10 es un paso crucial para ampliar los recientes logros que están convirtiendo a Arizona en un líder económico en el oeste y en todo el país. El alargamiento de este corredor comercial clave aumenta la capacidad, la seguridad y mejora el acceso para los conductores locales”, comentó John Halikowski, director del Departamento de Transporte de Arizona.
Los fondos estatales dedicados cubrirán 20 millas entre Phoenix y Casa Grande. La inversión posicionaría competitivamente a Arizona para recibir fondos federales adicionales para completar el trayecto, dieron a conocer las autoridades estatales.
“La finalización de la ampliación de la autopista I-10 es una prioridad importante que tendrá un impacto sustancial en los residentes y negocios de la ciudad de Casa Grande”, dijo el alcalde Craig McFarland.
Casa Grande es una comunidad en Arizona que se ubica entre Phoenix y Tucson.
El gobierno de Arizona señaló que acelerar el proyecto de ampliación de la I-10 aliviaría gran parte de la congestión del tráfico en el tramo vital de la carretera, mejoraría la seguridad pública y aceleraría el crecimiento económico para el centro de Arizona y la Comunidad India del Río Gila.
La inversión de 400 millones de dólares propuesta por el gobernador Ducey seguiría a los 50 millones de dólares proporcionados en el año fiscal 2022, y a los 90 millones de dólares para mejorar el puente del río Gila. Las mejoras en la infraestructura del puente fueron el último obstáculo en la ampliación general de la I-10 entre Phoenix y Casa Grande.
Los trabajos de diseño de este proyecto están en marcha y se prevé que el inicio de la construcción sea para 2023; además de que se estima que las labores tarden entre uno y dos años en completarse.