A dos años de que comenzó el fenómeno global de la pandemia, ya se vislumbra un futuro más esperanzador gracias al avance de la vacunación contra COVID en todo el mundo y los cuidados aprendidos durante este tiempo para evitar la propagación del virus.
De esta manera la economía la educación y otras actividades han comenzado a retomar sus ritmos normales en busca de recuperar los niveles que tenían antes de la pandemia.
Para conocer la situación actual en la que se encuentran pequeñas empresas (mejor conocidas como Pymes en Latinoamérica), la Oficina del Censo de los Estados Unidos realizó la encuesta Small Business Pulse, a través de la cual recopiló respuestas en todo el país del 28 de febrero al 6 de marzo.
El estudio arrojó que 20.5 por ciento de las pequeñas empresas de EU han vuelto a su nivel normal de operaciones. En el caso particular de Texas, -uno de los estados con mayores índices de industria, comercio y crecimiento económico- 20.6 por ciento de las Pymes reportan haber vuelto a los niveles normales, una cifra ligeramente superior al promedio nacional durante este mismo período de tiempo.
Cabe comentar que el gobierno federal estadounidense, a través de esta dirección del SBA, otorgó préstamos de apoyo durante 2019 y 2020 a todas las pequeñas empresas que lo solicitaron y cumplieron con los requisitos. Los préstamos iban desde 10 mil hasta millones de dólares, y en total la bolsa de préstamos ascendió a 349 mil millones de dólares.
De acuerdo con Goldman Sachs, el acceso rápido a los fondos fue fundamental, tanto que la recuperación ha llegado a estos niveles y el 91 por ciento de los pequeños negocios encuestados confían en los planes y soporte desplegado por la SBA. De la encuesta, 63 por ciento de los pequeños empresarios dijeron haber sufrido solo mínimos o moderados efectos negativos y solo 22 por ciento dijo haber sufrido impactos negativos a largo plazo.
De las empresas que se dedican al sector de la construcción, 46.9 por ciento informó demoras de proveedores nacionales por la falta de suministros o insumos; además, 18.4 por ciento también tiene este mismo problema con proveedores extranjeros.
Por otro lado, entre las Pymes de servicios de alojamiento y alimentación del estado se reportó una disminución de 13.5 por ciento de las horas trabajadas por los asalariados.
También, durante el mismo lapso de tiempo previamente citado, se presentó una reducción de 24 por ciento de los ingresos de las pequeñas empresas texanas.
Otro factor contra el que luchan para sobrevivir todas las pequeñas empresas en Texas, es tener empleados responsables con baja rotación de personal. Sin embargo, según la encuesta realizada, 18 por ciento de las compañías informaron verse afectadas por la disponibilidad de los trabajadores actuales.
Aunque aún falta mucho camino por recorrer, empezar con un poco más 20 por ciento de recuperación de las Pymes en Texas al segundo mes del año, pinta para que con el paso de los meses se tenga un escenario más alentador.