LAREDO, Texas.- El tema de la salud es de gran importancia en los Estados Unidos; programas como el Obamacare -hoy renombrado Ley de Cuidado de la Salud a Bajo Precio, PPACA- han dado acceso a millones de personas a cobertura médica aún cuando sean de bajos recursos. Por ello, Texas se ha puesto manos a la obra para mitigar el problema de personas sin seguro en el estado, al facilitar casi 570 mil nuevas inscripciones a planes de salud asequibles para este 2023.
De acuerdo con datos federales, los recién asegurados llevaron al estado de la estrella solitaria a superar la marca de 2.4 millones de residentes que buscaban la cobertura en HealthCare.gov durante el periodo de inscripción abierta que finalizó el pasado 15 de enero.
Las familias y trabajadores de Texas que tengan ingresos menores de 70 mil dólares anuales pueden tener seguro médico hasta con el 100 por ciento de subvención y todos los menores de 18 años pueden gozar de seguro bajo el plan CHIP.
Con ello, el registro de texanos incrementó en 31 por ciento comparado con el 12.4 por ciento a nivel nacional.
Además, la pandemia del COVID-19 fue determinante para evidenciar lo rezagado que estaba el país en el tema de la salud. Tras ello, se otorgaron generosos subsidios federales para que la mayoría de las personas, sino todas, tuvieran alguna cobertura, esto continuará así hasta 2025.
Un cambio de regla permitió también a los miembros de la familia, por primera vez, agregar una cobertura subsidiada por separado cuando el seguro de la compañía del sostén de la familia no es asequible para todos.
En octubre pasado, el gobierno ideó una solución normativa para el llamado “fallo familiar”, situación que ocurre cuando el proveedor de la familia tiene cobertura médica del trabajo pero no puede agregar a su cónyuge e hijos a dicho plan, y la familia no es elegible para los subsidios. A partir de 2023, esos miembros de la familia podrían solicitar planes subsidiados por separado.
Según las estimaciones de Kaiser Family Foundation, más de 5.1 millones de personas estaban en el fallo familiar durante 2019, incluidos 671 mil tejanos.
Por otro lado, como producto de las disputas entre Republicanos y Demócratas, Texas se encuentra entre los 11 estados que han rechazado la expansión de Medicaid, el programa que brinda cobertura a los residentes de bajos ingresos como parte de la ley de salud de 2010. Es así como el 18 por ciento de la población texana no contaba con seguro en 2021, la proporción más alta en el país, y el doble de la tasa de no asegurados de EU del 8.6 por ciento.
Los legisladores republicanos de Texas han expresado su preocupación por los costos que implica la expansión del programa, aún cuando el gobierno federal es quien cubre la mayor parte del gasto. De seguir así, el estado podría liderar por más años el número de personas sin seguro, debido a disputas políticas, que dejan de lado el bienestar de la ciudadanía.