La décimo segunda edición del Salón Internacional de Alta Relojería (SIAR) fue una clara muestra de que el sector goza de cabal salud en el país. Este año cinco marcas que enaltecen la ingeniería relojera mundial -Chopard, Tag Heuer, Hublot, Zenith y Corum- presentaron sus ediciones especiales para México-, justo en los días previos a la celebración del Día de Muertos. Las calaveras son el motivo persistente, pero la inspiración también llegó de otros símbolos, como el Ángel de la Independencia, la Virgen de Guadalupe y el arte huichol.
El lanzamiento de esas piezas con incrustaciones de piedras preciosas, trabajadas principalmente en oro y platino y con sofisticadas máquinas, se planeó para satisfacer al mercado más redituable de América Latina.
De acuerdo a cifras que la consultora Euromonitor Internacional dio a conocer en julio pasado, las ventas del sector relojero de lujo en México crecerán a 12 mil 800 millones de pesos para 2022, 3 mil 500 millones más que los 9 mil 300 millones alcanzados en 2017.
"Hay un mercado muy importante de coleccionistas y para las marcas es importante traer piezas inspiradas en su cultura, es uno de los mercados que más está creciendo", explica Julien Rolao, representante de Zenith en México.
La marca presenta por primera vez una selección de tres modelos con grabados artesanales pensados para el consumidor nacional. Se trata de Defy Zero G, que incluye imágenes de la Virgen de Guadalupe (agotado), calaveras inspiradas en las figuras de papel picado y una calavera pirata con esencia caribeña; cada uno está disponible en sus versiones de oro rosa, oro amarillo y titanio. Los relojes de oro tienen un precio de 185 mil dólares, mientras que los de titanio, de 125 mil dólares.
Otra de las firmas que se aventuró por vez primera a realizar un diseño inspirado en la cultura mexicana fue Chopard, que de acuerdo a personal de la compañía fue adquirido durante una venta previa al SIAR, y en tan sólo nueve minutos. El Espíritu de la Santa Muerte es una pieza única en oro rosa que se labró a mano durante 26 días. Gracias a un acuerdo con el comprador y por tratarse de una pieza icónica se permitió su exhibición. Su esfera resalta la imagen de una calavera chimuela con dientes de madre perla y ojos de sol. Tiene calendario perpetuo, indicadores de hora, día de la semana, mes y año bisiesto.
"Es un halago que se quede en México, se pagaron 300 mil dólares por la pieza", comentó una fuente de la firma.
El arte huichol llegó en forma de alacranes, venados y serpientes a las esferas de cuatro modelos creados con 235 chaquiras bañadas en oro, resultado de la alianza entre la relojera Corum y Menchaca Studio. En su diseño colaboraron artesanos wixarikas. El modelo más exclusivo está hecho en oro blanco y el precio es de 56 mil 750 dólares más IVA. Parte de las ganancias de su venta son para apoyar la herencia artística de ese grupo étnico.
Tag Heuer repite en 2018 con una edición renovada de su Carrera Heuer con dos modelos: el 01 Edición Especial Ángel de la Independencia, y el 02, un tourbillon, edición limitada a 20 piezas. Tiene caja de cerámica, agujas en color verde, blanco y rojo y la palabra México en el bisel.
El Big Bang Único edición especial México, de Hublot, tiene un diseño tricolor en la esfera y en la correa; el bisel incluye zafiros de colores y diamantes. La esfera del Big Band Único Skull está decorado con una calavera inspirada en el Día de Muertos y tiene correas intercambiables. También se presentó la versión mexicana que el artistas francés Richard Orlinski hizo para la marca, él creó el modelo Aerofusion, cuya caja de cerámica azul se cambió a una verde bandera. Las 30 piezas disponibles se agotaron, cada una de 18 mil 800 dólares.