Las microesferas presentes en exfoliantes y geles de ducha para ayudar a limpiar la piel en realidad están causando un daño inesperado a los mares y a tu organismo.
Estas pequeñas perlas pertenecen a un grupo de piezas hechas de este material que son menores a cinco milímetros y que al no disolverse, se van por el drenaje; debido a que muchas plantas de tratamiento de aguas residuales no pueden filtrarlas, una gran cantidad de éstas llegan a los cauces de ríos y mares en todo el mundo, en los que peces y otros animales marinos las ingieren, señaló un artículo de The New York Times.
"Cerca de ocho millones de toneladas de plástico entran en los océanos del mundo al año, de acuerdo con un informe de 2015 de la revista Science. Aunque las microesferas representan solo un pequeño porcentaje de esos plásticos, hay una creciente preocupación por su presencia en océanos, lagos y ríos", indica la publicación.
Estas microesferas también están presentes en las pastas de dientes, la goma de mascar, productos industriales de limpieza, fibras textiles sintéticas y llantas; al llegar a los cuerpos de agua, son consumidos por animales que a su vez son consumidas por el ser humano, los cuales pueden causarle diversos trastornos de índole hormonal o en su sistema reproductivo.
Países como Reino Unido, Estados Unidos e Italia han impulsado la prohibición del uso de microesferas en este tipo de productos, puesto que en una sola ducha con un gel de baño que las contenga, se pueden desechar hasta 100 mil de ellas, señaló el periódico neoyorquino.