El Servicio Sismológico Nacional (SSN) reportó un sismo de magnitud 1.8 grados en la escala de Richter, en punto de las 18:41 horas de este domingo 14 de mayo, con epicentro en la Magdalena Contreras. De acuerdo con el C5, se percibió en algunos lugares de la Ciudad de México.
La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRPC) de la CDMX informó que, hasta el momento, no se reportan daños ni eventualidades y recordó a la población que la alerta sísmica no se activa cuando el epicentro es en la capital.
Establecimos comunicación con Unidades de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de las Alcaldías; no se reportan eventualidades.
— Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y PC (@SGIRPC_CDMX) May 15, 2023
Permanecemos atentos. https://t.co/SgvuwcRG6x
Microsismos en CDMX: ¿Temblores pequeños ayudan a evitar un gran terremoto? Esto sabemos
Aunque se dice que los sismos de baja magnitud sirven para posponer un gran terremoto al aliviar la presión en las fallas, esta creencia es falsa, señala la Red Sismológica Nacional de Costa Rica.
Es cierto que los sismos de baja magnitud liberan una pequeña parte del estrés acumulado en la Tierra, pero no es del todo suficiente ni equivalente a la liberación de energía que representa un temblor de gran magnitud.
Los sismólogos han determinado que se necesitan alrededor de 32 sismos de magnitud 5, 1000 de magnitud 4 o bien 32 mil de magnitud 3, para equiparar la cantidad de energía liberada por un temblor de magnitud 6., por lo que tendrían que ocurrir 163 840 000 000 sismos de magnitud 2 para liberar el estrés que representa un evento de magnitud 9.
Aunque los microsismos de bajas magnitudes no son un mecanismo para evitar eventos de mayor importancia, los expertos han observado que su ocurrencia frecuente o un incremento en su ocurrencia puede preceder eventos como terremotos.
“Esto no es una relación absoluta sino una observación frecuente que permite seguir estudiando la sismicidad y la tectónica”, destacaron.
Hasta la fecha, es imposible predecir la ocurrencia de un evento sísmico aunque se puede evaluar la acumulación de estrés (con ayuda de la estadística) en las zonas de falla.