Investigadores del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) hallaron la que podría ser la causa de los microsismos que se han registrado en algunas zonas de la Ciudad de México (CDMX). Se trata de la falla geológica Plateros-Mixcoac, la cual sería responsable de los sismos de baja intensidad ocurridos entre diciembre de 2023 y enero de este año.
Recordemos que en los últimos dos meses se han presentado 23 microsismos de entre 1.1 y 3.2 grados en las alcaldías Magdalena Contreras y Álvaro Obregón, con una profundidad menor a los 1.4 kilómetros. Pero a diferencia de años anteriores, los movimientos más recientes provocaron daños en al menos ocho estructuras.
Este fenómeno llamó la atención de los expertos de la Coordinación de Ingeniería Sismológica y la Unidad de Instrumentación Sísmica (UIS) del Instituto de Ingeniería, quienes colocaron estaciones de registro sísmico con sensores de velocidad y aceleración en la zona cercana a los epicentros.
De esta manera, fue posible realizar el trazado de la falla denominada Plateros-Mixcoac, cuya existencia ya se había sugerido previamente entre académicos; sin embargo, hasta ahora pudo ser comprobada.
¿Qué causó los sismos en Mixcoac en diciembre de 2023? Descubre los hallazgos preliminares de la investigación del Instituto de Ingeniería de la UNAM y las acciones propuestas. https://t.co/wzYcBYwiYx #Sismología #InvestigaciónUNAM @SismicaUnam pic.twitter.com/AowpuTY5dz
— Instituto de Ingeniería (@IIUNAM) February 8, 2024
¿Qué se sabe hasta ahora de la falla Plateros-Mixcoac?
La investigación titulada ‘El Rompecabezas de la Sismicidad del Poniente de la Ciudad de México’ fue presentada por diez investigadores de la UNAM, en colaboración con el Departamento de Estudios de Gestión de Desastres y el Instituto de Teledetección de la India.
En ella, se explica que los hallazgos se establecieron a partir de una grieta “de poco más de un kilómetro de longitud que cruza ininterrumpidamente la zona de Mixcoac”, misma que fue analizada a través del sistema DInSAR, que sirve para identificar desplazamientos a ambos lados de la fisura.
De igual modo, para determinar movimientos permanentes del terreno en grandes áreas, se recurrió a imágenes satelitales recolectadas durante varios días para determinar si existía un patrón “a una falla de tipo normal”. Fue así que los investigadores finalmente dieron con hundimientos o desplazamientos que se extienden 500 metros al norte.
“Este hallazgo, al cual llamaremos la falla Plateros-Mixcoac ha sido de alguna forma propuesto en conversaciones con académicos e inclusive se sugiere en el mapa de riesgos de la Ciudad de México, pero nunca había sido confirmado. Lo hemos corroborado de manera preliminar mediante: a) epicentros en la zona norte de la falla Plateros-Mixcoac y b) desplazamientos verticales o hundimientos cuyo patrón es el de una falla normal.”, menciona el estudio.
El artículo concluye que esta falla geológica seguirá siendo un tema de investigación para la UNAM debido al impacto que puede tener en las construcciones, ya que las estimaciones utilizadas para definir acciones de diseño de la zona no consideraron su existencia.
Microsismos en CDMX, por reactivación de fallas geológicas
Parte del estudio realizado por la UNAM también menciona la posibilidad de que los microsismos en la CDMX se deban a “la reactivación de fallas geológicas presentes en la zona.”
Los especialistas recordaron que durante el siglo XX, por lo menos tres episodios de este tipo ya habían sacudido esta zona del poniente desde 1950 y hasta principios de 1980. El primero se registró entre 1950 y 1956 cerca de la presa Mixcoac, el segundo en Santa Cruz Ayotuzco en 1959 y el tercero en 1981, también en la zona de Mixcoac.
Señalan que la reactivación de estas fallas puede tener varios orígenes, siendo la más probable la acumulación de tensión en las mismas. Aunque también puede deberse al hundimiento del Valle de México y a la recarga de los mantos acuíferos.