Una joven denunció que una pensión canina le entregó sin vida a sus dos perros, Nala y Tango, en Xochimilco, de acuerdo con su testimonio.
Las organizaciones en favor de los derechos animales han pedido justicia para los lomitos y han señalado la impunidad en este tipo de casos.
Ellos son Nala y Tango, los perros asesinados en la pensión de Doggy City,
— Fundación Toby (@FundacionToby) April 8, 2024
Tuvimos el honor de conocer a sus tutoras y esos animales fueron encerrados en una kenel por que estaban ladrando, les entregaron a dos miembros de su familia muertos y llenos de sangre.
Amigos ayúdennos… pic.twitter.com/7Oizmux6zq
Cronología: Así fue la muerte de los perritos Nala y Tango
La usuaria Mar contó su historia luego de que le entregaran a sus dos perritos, Nala y Tango, sin vida.
En un breve video compartido por la Fundación Toby, ella se presenta como tutora de los animales y menciona que pagó el servicio de pensión de Doggy City, en Xochimilco, para que sus perritos se quedaran resguardados ahí por tres días mientras ella estaba de viaje.
Ella explicó en su cuenta de X (antes Twitter) que los perritos fueron recogidos por Alfredo ‘A’ el lunes 25 de marzo. Y describió que él era una persona de confianza pues en varias otras ocasiones sus lomitos habían estado en esa pensión.
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— mar (@arceomaar) March 30, 2024
DEJE A MIS PERROS EN PENSIÓN Y LOS REGRESARON MUERTOS
el día lunes 25 de Marzo el sujeto Alfredo A. vino a recoger a mis perritos para llevarlos a la pensión, ya que yo iría de vacaciones. cabe aclarar que era una persona de confianza, ya habíamos dejado a su+
En esta ocasión, la joven contó que los días 25 y 26 de marzo, Alfredo les envió fotos de Nala y Tango, como se acordó. Sin embargo, al tercer día, el miércoles 27 de marzo, comenzó a ignorar los mensajes de la tutora.
La joven regresó de su viaje el día jueves y la pensión se negó a entregar a los perritos bajo el argumento de que “ya era tarde”. Ella no sospechó nada ya que él era una persona de confianza y acordaron que la entrega sería el viernes 29 de marzo antes de las 10:00 horas. No obstante, a las 7:00 horas de ese día, Alfredo ‘N’ contactó a la mamá de la joven para informarle que había un problema porque los perros estaban muertos.
La usuaria Mar también compartió un video donde se escucha cómo él llega a entregar los cuerpos de los perritos. Él afirma que ambos estaban en un kennel jumbo (es decir, una jaula jumbo) porque “estuvieron ladrando mucho”.
En un video compartido por Fundación Toby, la joven pide ayuda para que haya justicia para Nala y Tango.
La regulación en las pensiones y guarderías para perros
Como lo señala la propia tutora de Nala y Tango en su video, el asesinato de sus perritos no es el primero en la Ciudad de México y cada vez hay más casos de este tipo.
Uno de ellos que también llamó la atención fue el caso del perrito Maple, un Shiba Inu. En julio de 2022, la joven Adriana denunció en redes sociales que había llevado a Maple a un campamento de entrenamiento canino en la CDMX, un lugar al que ya había ido en otras ocasiones. No obstante, en esa ocasión, le regresaron solo una urna con cenizas. Maple fue cremado sin autorización.
Adriana dijo que el lugar, You Can Dog Training, era dirigido por el entrenador Antonio ‘A’; fue la novia de él, Valeria, quien le escribió a Adriana para decirle que estaban en camino al veterinario a la 1 de la madrugada, porque su mascota “había sido picada por una serpiente”.
Ella insistió en que le dieran más información para poder acompañarles a la clínica, pero se rehusaron a decirle dónde.
Más entrada la madrugada, el entrenador Antonio pidió a Adriana que se vieran en el Deportivo Xochimilco. Ahí le entregaron las cenizas en una urna. Algo que ella no autorizó.
Apenas hace unos días, Adriana contó en redes sociales que la investigación por el caso de Maple seguía.
A raíz de este caso fue impulsada la Ley Maple, una iniciativa para modificar la Ley de Protección a los Animales en la ciudad.
La Ley Maple busca que el gobierno regule las pensiones, veterinarias, hospitales, escuelas de adiestramiento, pensiones, hoteles para perros y el trabajo de paseadores, ya que con frecuencia estos establecimientos operan sin medidas de seguridad y eso pone en riesgo la vida de los perros y otros animales domésticos.