“Las casas de madera, parecen derrumbarse”, dice la canción de Ramón Ayala, ¡pero no! De acuerdo con una nueva investigación, la construcción de nuevas viviendas urbanas con madera en lugar de concreto, hormigón y acero, evitaría más de 100 mil millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) para 2100.
De acuerdo con el estudio elaborado por el Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático (PIK) en Alemania, la madera es un recurso renovable y tiene la huella de carbono más baja de cualquier material de construcción comparable.
Los investigadores modelaron lo que sucedería si las casas urbanas se construyeran con madera. Esto representa alrededor del 10 por ciento del presupuesto de carbono aún disponible para el objetivo climático de 2°C.
Casas de madera emite mucho menos CO2
El uso de madera de ingeniería para la construcción de edificios puede ayudar a evitar las emisiones asociadas con los materiales de construcción convencionales. “La producción de madera diseñada emite mucho menos CO2 que la producción de acero y cemento”, aseguró Abhijeet Mishra, autora principal del estudio.
“La madera procesada también almacena carbono, lo que convierte a las ciudades madereras en sumideros de carbono únicos a largo plazo; para 2100, esto podría ahorrar más de 100 mil millones de toneladas de emisiones CO2 adicionales”, agregó la experta.
El estudio, que fue publicado en la revista Nature, es el primero en examinar los efectos de un cambio generalizado a las ciudades madereras en el uso de la tierra, las emisiones relacionadas con el cambio de uso de la tierra y el secuestro de carbono a largo plazo en los productos de madera recolectada.
“Más de la mitad de la población mundial vive actualmente en ciudades, y para 2100 este número aumentará significativamente. Esto significa que se construirán más viviendas con acero y hormigón, la mayoría de las cuales tienen una importante huella de carbono”, dijo .
“Pero tenemos una alternativa, podemos albergar a la nueva población urbana en edificios de mediana altura; es decir, de cuatro a 12 pisos, hechos de madera”, agregó Abhijeet.
“Nuestra simulación muestra que se puede producir suficiente madera para nuevos edificios urbanos de mediana altura sin una gran repercusión en la producción de alimentos”, explicó el coautor del estudio, Florian Humpenoder.