Culturas

'Customatismo', retrospectiva de Rubén Ortiz Torres en el MUAC

Considerado una figura clave del arte contemporáneo, el artista mexicano propone en esta exposición una ruta migratoria para recuperar Aztlán a través del arte.

En el mito precolombino, el pueblo azteca, guiado por Huitzilopochtli, sale de una isla llamada Aztlán en busca de la señal que lo llevaría a fundar México Tenochtitlan. En Customatismo, primera exposición retrospectiva de Rubén Ortiz Torres, Aztlán es el pretexto para plantear una reconquista simbólica del norte a través del arte.

El pasado 26 de octubre abrió sus puertas la muestra Customatismo, de Rubén Ortiz Torres, artista mexicano radicado en California, que podrá verse en el Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC) hasta el 15 de marzo del 2020.

Rubén Ortiz Torres, nacido en México en 1954, es considerado una figura clave del arte contemporáneo desde mediados de los años 80. Tras dejar México para mudarse a Los Ángeles, California, ha continuado desarrollando su trabajo artístico a partir de formatos como la pintura, las fotografías, los objetos, instalaciones, videos y películas.

Su obra, de la que podemos ver una muestra sustancial en el MUAC, reconecta al pop con las estrategias conceptuales de la Escuela Mexicana que promovieron un cambio radical en el desplazamiento de la "alta cultura" a la "popular". Para ello, se vale de recursos cómicos o irónicos, donde a veces el artista nos revela desafiantes relecturas de la tradición o parentescos secretos, como el de Warhol como un posible nieto de Diego Rivera.

En su obra, ya sea por medio de fragmentos de un documental experimental (Frontierland, codirigido en los 90 con Jesse Lerner) o de su excéntrica Alien Toy, camioneta estilo lowrider dotada de un complejo sistema hidráulico, Ortiz Torres nos muestra la forma en que la historia de la vanguardia logra negociar con la cultura popular del continente americano, en una constante migración de América Latina hacia Estados Unidos.

En otras palabras, Ortiz Torres propone una ruta migratoria para la reconquista de Aztlán (del norte), a partir del arte. Las piezas seleccionadas para esta retrospectiva, bajo la curaduría de Mariana Botey, expresan lo indispensable de este trabajo para una comprensión de las nuevas formas de política estética.

Su inventiva se nos revela como un territorio de laberintos donde las alegorías de "lo popular" y "lo nacional" son ironizadas, recreando una espiral de flujos migratorios, simulacros y mutaciones paródicas que no dejarán de sorprender al visitante del museo universitario.

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