El Fondo de Cultura Económica ya no formará parte del órgano que entrega el Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, anunció ayer el director general de la institución, Paco Ignacio Taibo II. Sin precisar el monto que el FCE aportaba al máximo galardón que otorga la organización, dotado con 150 mil dólares, señaló que la decisión se debe a la política de austeridad de este gobierno.
Al presentar el reporte de sus primeros 62 días al frente del FCE, el funcionario dijo que ésta y otras medidas se tomaron luego de una revisión del estado en el que operaban el Fondo, las librerías Educal y la Dirección General de Publicaciones, que se agruparán en una sola entidad.
"Lo del premio estaba empaquetado en una cosa que se llamaba Patrocinio Oro y no le entramos. No vamos a tener publicidad en ese patrocinio", señaló y agregó que el FCE gastaba en la feria alrededor de 7 millones pesos por promoción.
Pérdidas de hasta un millón 300 mil dólares al año en la red internacional de librerías, bodegas llenas de un "fondo negro", de libros con algún daño, o títulos de poco interés, así como una disparidad en la participación en las ferias del país son algunos de los problemas que, dijo Taibo, ha ido resolviendo junto con su equipo.
El funcionario adelantó que en la reunión del órgano mayor del FCE, la tarde de ayer, se acordarían acciones como la modificación de su estatuto orgánico, que prohibía a la editorial hacer donaciones y que, a partir de hoy, comenzará a donar más de 8 millones y medio de libros que tiene en bodega.
Sobre la integración de las tres entidades, dijo que hay tres propuestas para concretarla y que se decidiría por una de ellas tras la reunión de ayer. Una se refiere a la emisión de un edicto presidencial; otra, que la Dirección General sea transferida al FCE por mandato de la Secretaría de Cultura; y la tercera, que se compren las acciones de Educal. Sobre esta última, aseguró que aún no recibe respuesta de la Secretaría de Hacienda, a la que solicitó asumir el adeudo de 72 millones de pesos de la cadena librera para salvarla de la quiebra.
Reiteró su política de no destruir un solo libro, no cerrar ninguna librería y la publicación de coediciones con los principales sellos trasnacionales en un esquema que permitirá -dijo- vender los ejemplares a la mitad de su precio actual.
Entre sus primeras acciones, Taibo estableció convenios con universidades para coedición y distribución, abrió una biblioteca infantil en las Islas Marías y echó a andar un plan de ofertas, de 49.50 a 8 pesos por libro. Hasta el 18 de marzo se habían vendido 54 mil 391 ejemplares.
En el corto plazo, planea realizar tres ferias infantiles en el país.