'Marioneta' o el arte del escapismo

El realizador Álvaro Curiel vuelve a contar una historia a través de una mirada extranjera. En Acorazado (2010) un mexicano observa la realidad cubana tras llegar a la isla por error, pues pretende dirigir su balsa hacia Miami. Ahora en Marioneta, cinta que estrena este fin de semana en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG), un cubano se adentra en la red de corrupción de los pordioseros de la Ciudad de México, para mostrar a una joven con talento histriónico que es posible escapar del destino.

Marioneta compite por el Premio Maguey del FICG, que se realizará del 8 al 15 de marzo. Narra la historia de Belén, quien pide dinero en los vagones del Metro, donde se topa con Ernesto, un actor que llega al país por un contrato de trabajo que no se cumple. Gracias a ese encuentro, Ernesto ejerce su oficio como profesor de un singular grupo: los pedigüeños del transporte colectivo.

"En México y en cualquier país latinoamericano hay mucho talento que se desperdicia, la gente no tiene acceso a estudiar o conectarse con lo que sabe hacer. La cinta habla de eso, de las Yalitzas que nadie mira", observa el realizador.

"Yalitza Aparicio es una chica que de la nada se cruzó en su camino con Alfonso Cuarón. En Marioneta hay dos personajes de la calle que al juntarse logran trascender. En este país de oportunidades perdidas, puede suceder. No sé si mi personaje seguiría haciendo películas, como no sabemos qué pasará con Yalitza, lo que sí es que su vida cambió completamente tras el éxito de Roma".

De acuerdo con el cineasta, quien codirigió en 2012 la cinta animada El Santos vs. la Tetona Mendoza junto con Alejandro Lozano y Andrés Couturier, el título quiere sugerir que otros deciden el destino sin darse cuenta; eso es el azar de la existencia. "Casi nadie logra liberarse de la clase social que le toca, de la historia que ya está marcada. Parecería que uno nace y ya está todo decidido".

Y, sin embargo, en esta trama que raya la fantasía, huir del entorno es perfectamente posible.

"Es un poco como el arte del escapismo. Ellos logran salir de lo que se les ha dictado como su única realidad porque eso es la ficción: transformar mentiras en una nueva verdad", concluye.

La película protagonizada por Fátima Molina, Rafael Ernesto y Juan Manuel Bernal recorrerá en los próximos meses diversos festivales internacionales, antes de su estreno anunciado en octubre o noviembre.