Carrera multicolor que con toda la dicha posible ha tenido un final en verde, blanco y colorado debido a la magnífica victoria del piloto mexicano Sergio Pérez, conduciendo por nota su auto Red Bull.
Plateada porque la lluvia le daba esa pátina a la marina de la bahía singapurense.
Negra, ya que llegó la noche y había que ponerse a chambear.
Color de hormiga, en tanto que lo que se dejaba venir era un acertijo que empezaba desde el momento de decidir con cuáles gomas iniciar el enfrentamiento.
En azul zarco, debido a que el agua atomizada les pegaba en los visores a quienes marchaban del segundo lugar hacia atrás; con tal espectro de color que acrecentaba su raro matiz debido a la fuerza de los ases de luz artificial en las calles del recorrido a toda prisa.
Amarilla cambiando de tonalidad, segundo a segundo, hasta llegar al ocre de la bilis… porque en el pit wall de Ferrari veían como su primer piloto no podía hacer mucho más, que ir siguiendo la huella de quien –a la postre– les infligiría otra derrota; ésta, con toda la barba.
Sí. Porque el corredor con el carro número 11 (a la sazón Pérez) no les dejó liderar ni siquiera una vuelta a los de Maranello. Vamos: ni esa que llaman la de la honra.
En otras palabras la verdad lata es que: los deshonró.
Y bueno, hasta morada. En tanto el coraje que pasaban; al ver los contrincantes, que ni con la presencia de cuatro apariciones de la patrulla de seguridad (virtual o no) podían alcanzar al de Guadalajara. A quien, por más que lo presionaba su obcecado perseguidor, no cayó en el error, durante las dos horas de la reyerta.
ANTECEDENTES
Que se deben de considerar.
Primero: Ferrari se ha destacado en este curso por ser el equipo dueño de las cuerdas de largadas en 10 ocasiones de 17 posibles y apenas ha redondeado esa proeza, ganando tres veces.
Esto es, que de poco les sirve hacerse con la pole position, sino sigue luego un triunfo.
Segundo. Que sobre su corredor consentido, Charles L., es con quien más se ceban los errores para hacer, de plano de él, una víctima propiciatoria de tanta burrada crónica.
Tercero. Ayer se anunció la predicción más lógica del mundo.
Que Ferrari y Leclerc tendrían que perder. Que el verdugo iría de ser Sergio Pérez a condición de que no se pareciera a los jarritos de Tlaquepaque que se rajan apenas uno los ve.
Desde luego: que debería de ganar, pero necesitaba no arrugarse.
COROLARIO
Ha resultado que a lo mero macho, el tapatío ha ganado, para brindar grande alegría a sus –muchísimos– seguidores.
A ellos, se les dedica esta nota porque está comprobado que dan fe de ser estoicos. Algo que por donde se lo quiera ver, tiene un gran mérito.
¡Ay Jalisco! estoy contigo “manque pierdas” y contimás ora que ganastes”…
¡A Mil Por Hora!
DE SU RONCO PECHO
Pérez / Red Bull: “Con claridad, ha sido éste mi mejor rendimiento”.
Leclerc / Ferrari: “La mala arrancada me ha metido el contrapié”.
Sainz / Ferrari: “Nunca encontré el ritmo adecuado con la trayectoria mojada. Me conformo con ser tercero”.
NÚMEROS
• 1 Década ha pasado y apenas Pérez ha conseguido facturar otro doblete así, en la misma temporada: la victoria en dos GP callejeros: Mónaco y Singapur. Vettel lo hizo, en el curso de 2011
• 1 Corredor y nadie más, ha ganado en Singapur largando desde un cajete con número par: Sergio lo hizo, arrancando desde el segundo puesto del partidero
• 1 Sólo podio había conseguido el tapatío en las seis carreras previas a ésta. Fue en Bélgica quedando segundo; el domingo 28 de agosto retropróximo
• 58 Es el sitio, en la historia de la F1, que le corresponde a Sergio Pérez como corredor que ha liderado –de orilla a orilla– en un Grand Prix
• 1 Ocasión tan sólo ha triunfado Red Bull en Singapur, desde el año 2013, cuando lo consiguió Vettel
• 11 Podios consecutivos los de Red Bull, en las calles singapurenses
• 3 Podios –al hilo– liga ahora Leclerc: siempre siendo el segundo y cada vez, detrás de un piloto de Red Bull
• 2 Carreras seguidas en Singapur, Charles, ha terminado como el del segundo lugar
• 12 Largadas de Ferrari, desde el GP de Miami, para terminar con sus dos unidades en el podio formadas en este mismo orden: Leclerc (2º) y Sainz (3º)
¡A Mil Por Hora!