El delantero del Wolverhampton, Raúl Jiménez, aún se encuentra en proceso de recuperación tras una lesión en el cráneo. Así lo mencionó en la serie de Star+, En primera persona.
A casi un mes y medio de que arranque el Mundial de Qatar 2022, Jiménez dijo que una parte de su cráneo aún no está totalmente soldada, por ello sigue usando bandas que ayuden a ‘contener’ en caso de recibir algún golpe en la zona.
Raúl Jiménez y su lesión en el cráneo
El futbolista mexicano recibió un fuerte cabezazo por parte de David Luiz, jugador del Arsenal, durante un partido a finales de noviembre de 2020.
El diagnóstico de dicho accidente en la cancha fue una fractura de cráneo para Jiménez, quien a pesar del fuerte golpe no cesó actividad tras algunas semanas de recuperación. No obstante, el delantero declaró que para lograr el regreso a la cancha tuvo que utilizar un recurso adicional a las rehabilitaciones: una banda en la cabeza.
“Hice partidos de pretemporada con una banda que ha ido cambiando. Antes era una protección completa, luego se hizo más chica y ahora es una banda, tipo cinta de cabello largo, que cubre más esa parte, pues es donde el cráneo no está completamente soldado y es de protección y no haya un golpe crítico.”, señaló.
Si bien la lesión ha mejorado, Raúl es consciente de que esa estructura ósea no regresará a su forma original.
“Tengo la fisura del cráneo y es difícil que me vuelvan a pegar en ese lugar, pero es recomendación de los médicos” destacó Jiménez para el programa de Star+.
Cabe destacar que tras el golpe con Luiz, el del Arsenal se mantuvo al pendiente de la salud de su colega.
“Desde que estaba en el hospital ya tenía mensajes suyos preguntándome cómo estaba, que estaba apenado y le dije que no pasaba nada, que era una jugada futbolera. Después ellos vinieron a jugar, salió expulsado, yo estaba en el palco y fue a saludarme”, dijo Jiménez.
Raúl Jiménez y la recuperación de la confianza en la cancha
Las ganas y el ímpetu del delantero para retornar a los juegos fueron parte crucial en el proceso, sin embargo el mexicano confesó que sí hubo temores de posibles recaídas en caso de que sufriera otro incidente.
No obstante, una vez que se incorporó a los entrenamiento fue recuperando la confianza.
“La primera vez que me dijeron que me darían balones para cabecear, fui con miedo de ver qué pasa, al ver que no pasaba nada, ya fue normal”, confesó.
Por otra parte, mencionó que también logró superar las reservas que tenía respecto a la zona donde se había accidentado.
“Entrar al campo, ir sin miedo e incluso sigo yendo a la misma zona de primer poste, la zona donde fue el accidente”, dijo para En primera persona.