En su búsqueda de pruebas del delito de lavado de dinero, la Oficina Federal de Policía Criminal registró el pasado martes la sede del Bayern Munich y el Allianz Arena, lo que pone al club alemán en la polémica debido a la cercanía de su presidente de honor, Uli Hoeness, con el oligarca ruso Alisher Usmanov.
Ambos habrían sido vecinos de villa en el Lago Tegernsee, localidad de Baviera, a la que el millonario se mudó en marzo de 2022, reportó el periódico local Bild. Se informó que “las pesquisas todavía no están completas”.
Según la versión, Hoeness tiene una estrecha relación al también cercano al presidente Vladímir Putin e incluso le habría dado entradas VIP con frecuencia, por ejemplo, para la Champions League, torneo en el que fueron eliminados en cuartos de final por el Manchester City.
Los dirigidos por el director técnico Thomas Tuchel no han tenido un buen inicio de año, por lo que tampoco han asegurado el título en la Bundesliga y, con un partido menos, enfrentarán este domingo al Hertha Berlín por la fecha 30, en donde con un triunfo pueden recuperar la cima de la tabla de posiciones tras la derrota del Dortmund, que lidera con 61 puntos, mientras ellos van abajo con 59 unidades.
¿Por qué registraron al Bayern Munich?
El gobierno de Estados Unidos anunció sanciones a la red financiera de Usmanov, que es uno de los hombres más ricos de Rusia, luego de la invasión a territorio ucraniano; las prohibiciones también son parte de la Unión Europea.
Es también sospechoso de mover dinero supuestamente de delitos como la evasión de impuestos entre 2017 y 2022. La oficina del fiscal responsable en Frankfurt dijo al medio: “Nuestra autoridad no está llevando a cabo ninguna investigación o multa contra el FC Bayern Munich o los responsables o miembros del club”.