La velocista campeona Caster Semenya ganó un posible referente caso legal este martes, después de que la Corte Europea de Derechos Humanos concluyó que las reglas del deporte que la obligaron a reducir médicamente sus niveles hormonales normales para competir fueron discriminatorias.
La decisión de la corte de derechos humanos con sede en Estrasburgo, Francia, cuestionó la “validez” de las contenciosas regulaciones atléticas, debido a que infringieron los derechos humanos de Semenya.
A pesar del éxito legal para la dos veces campeona olímpica tras dos apelaciones fallidos ante el máximo tribunal deportivo y la Suprema Corte de Suiza, esta decisión viene con condiciones. Debido a que busca que le vuelvan a permitir correr sin restricciones para buscar otra medalla en los próximos Olímpicos de París, la decisión de este martes, aunque importante, no significa un cambio inmediato a las reglas.
Eso podría tomar años.
La impugnación de la atleta sudafricana contra las reglas de testosterona inició en el 2018.
Pasó del Tribunal de Arbitraje Deportivo en Suiza, a la Suprema Corte de Suiza y ahora a la Corte Europea de Derechos Humanos. La decisión 4-3 del panel de jueces en favor de Semenya simplemente abrió el camino para que la Suprema Corte de Suiza reconsidere su decisión.
Esto podría llevar el caso de vuelta al TAS en Lausana y sólo en ese momento podrían obligar a World Athletics a eliminar la controversial regla.
Semenya, de 32 años, quien no ha podido competir en su prueba favorita de 800 metros desde el 2019, ha perdido cuatro años en la cúspide de su carrera y sólo tiene 13 meses para prepararse para París.
En un comunicado después de que la corte publicó al decisión, World Athletics no mostró señales de ceder y dijo que las reglas “seguirán”.
“Mantenemos la idea de que las regulaciones son necesarias, razonables y proporcionadas para proteger la justa competencia en la categoría femenina”, indicó World Athletics.
Además, la corte ordenó al gobierno suizo a pagarle 60 mil euros (65 mil dólares) a Semenya por costos y gastos.
No hubo una reacción inmediata de Semenya y sus abogados en Sudáfrica.
Aunque Semenya está en el centro del problema de elegibilidad en el deporte por el sexo, no es la única atleta afectada. Al menos otras tres medallistas olímpicas fueron afectadas por la regla.
No hay límites a los niveles de testosterona en los hombres.
La corte “cuestionó seriamente la validez” de las reglas de testosterona, incluyendo los efectos secundarios por el tratamiento hormonal, la dificultad de mantenerse dentro de las reglas al intentar controlar sus niveles naturales hormonales y la “falta de evidencia” sobre que los altos niveles de testosterona realmente les da una ventaja.
El último punto es el foco de la regulación, debido a que World Athletics ha asegurado que intentan lidiar con la injusta ventaja que Semenya tiene sobre otras mujeres.
La corte también señaló que se había negado un “remedio efectivo” a la corredora sudafricana contra la discriminación cuando el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS) y la corte suprema suiza denegaron sus dos apelaciones previas contras las normas.
La deportista ganó los 800 metros en los Juegos de 2012 y 2016, pero desde 2019 tiene prohibido competir en esa prueba debido a las normas de testosterona y no defendió su título en los Juegos de Tokio.