La marcha de Liverpool a su primer campeonato de la liga inglesa en 30 años empieza a asemejarse a una procesión y es que el campeón reinante, el Manchester City, no parece tener los recursos para impedírselo.
La brecha entre los dos principales aspirantes al título se ensanchó a unos impensables 11 puntos este sábado, cuando el central Virgil van Dijk firmó un doblete para darle otra victoria a Liverpool.
Esto ocurrió horas después que la frágil defensa del City encajó el empate a 2 goles a los 88 minutos en Newcastle. El Liverpool, por otra parte, derrotó 2-1 al Brighton en Anfield.
Liverpool acabó con 10 hombres tras la expulsión de su arquero brasileño Alisson Becker a los 76 minutos por una mano fuera del área, con la que Brighton logró descontar de tiro libre.
Si el tercer del torneo, el Leicester City, que está igualado en puntos con el City, no logra vencer a Everton el domingo, Liverpool quedará con una ventaja de doble dígito sobre sus más cercanos perseguidores cuando apenas ha completado 14 de las 38 fechas de la Liga Premier.
Inclusive con su reciente historial de quedarse 'corto' en la Premier, se antoja demasiado improbable que Liverpool malogre esta oportunidad, especialmente con un equipo que se mantiene invicto en la Premier y apenas ha cedido un par de puntos.
Todo indicaba que el sensacional zapatazo de Kevin De Bruyne, un remate que pegó primero en el travesaño a los 82 minutos, le iba a dar la victoria al City en St. James' Park.
Sin embargo, en el cobro de un tiro libre por el costado derecho del área chica, el balón quedó a los pies de Jonjo Shelvey. El ex de Liverpool definió de primera desde fuera del área y clavó el balón en un ángulo inferior.
El City se adelantó a los 21 minutos con el gol de Raheem Sterling, pero el local respondió cuatro minutos después mediante su lateral izquierdo Jetro Willems.
Se trata del segundo año seguido que el City se marcha de St. James' Park sin poder ganar.
En tanto, José Mourinho sigue obrando 'magia' en Tottenham, ahora con victorias en sus tres partidos a cargo — dos en la Premier y una en la Liga de Campeones — tras el triunfo 3-2 ante Bournemouth.
Dele Alli, revitalizado con la llegada de Mourinho al banquillo, anotó dos de los goles de los Spurs. El otro tanto fue obra de Moussa Sissoko.
Luego de tomar las riendas con Tottenham en el décimo cuarto puesto de la tabla y en crisis, Mourinho ya les tiene en el quinto, y súbitamente más cerca de la zona de clasificación de la próxima Champions.
Ello se debió a que el cuarto lugar, el Chelsea, perdió inesperadamente en casa 1-0 ante West Ham, cuyo técnico chileno Manuel Pellegrini tomó respiro tras una serie de malos resultados. Aaron Cresswell anotó en el segundo tiempo por West Ham.
También el sábado, Crystal Palace ganó a domicilio 2-0 ante Burnley para quedar a mitad de tabla.