La policía peruana confirmó el hurto de más de un centenar de equipos de comunicaciones del interior del estadio Monumental, y que iban a ser usados el sábado durante la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Flamengo.
El jefe policial de Lima, coronel Herbert Ramos, dijo este viernes a la radio local RPP que el robo de 119 radios portátiles, 90 cordones intercomunicadores, 65 baterías, 3 cargadores múltiples y 35 hands free se produjo la noche del miércoles.
Añadió que los objetos sustraídos estaban bajo supervisión y vigilancia de las dos empresas dueñas de los equipos contratados por la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol) y por los dueños del estadio Monumental.
La noticia del hurto se conoció en la víspera, cuando un noticiero nocturno informó sobre la denuncia realizada ante una comisaría de Lima por las empresas dueñas de los equipos de comunicaciones que fueron afectadas por la sustracción.
Es la primera vez que la final de la Copa Libertadores se definirá en un único encuentro. El partido en el Monumental de Lima se decidió de forma sorpresiva a inicios de mes, luego que la Conmebol cambió la sede inicial en Santiago de Chile debido a las intensas protestas en el país.
Se trata de la segunda vez consecutiva que el partido decisivo de la Libertadores debe cambiarse de sede.
El año pasado, el cotejo de vuelta de la final River-Boca debió trasladarse a Madrid. La decisión se tomó luego que hinchas de River atacaron con piedras y otros proyectiles el autobús en el que llegaban los jugadores de Boca al estadio de sus rivales acérrimos para disputar el encuentro.
River ganó por 3-1 en el estadio Santiago Bernabéu de la capital española.