El Gobierno Federal y el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) firmaron hoy el Acuerdo para Promover la Inversión y el Desarrollo Incluyente, el cual fijó como meta que la inversión física en el país pase de 20 por ciento en 2018 a 25 por ciento del PIB en los próximos años, a fin de alcanzar tasas de crecimiento de 4 por ciento anual.
"Si queremos alcanzar las tasas de crecimiento necesarias, el país requiere invertir bien en proyectos que sean económica y socialmente rentables", dijo el presidente del CCE, Carlos Salazar, frente al presidente Andrés Manuel López Obrador y los presidentes de las 12 cámaras empresariales que integran el Consejo.
El acuerdo busca priorizar la inversión en regiones que hasta ahora no han crecido, en particular, el sur-sureste del país; en sectores claves que generen desarrollo, como energía, infraestructura y agroindustria, y en las empresas de menor tamaño que puedan insertarse con éxito en cadenas de valor regionales, nacionales e internacionales.
Salazar Lomelín dijo que un elemento central del acuerdo es que establece dos mecanismos encabezados por el presidente de la República y que son coordinados por el Consejo para el Fomento de la inversión y el empleo, y el crecimiento económico con el apoyo del Consejo Coordinador Empresarial.
Aquí, los 10 compromisos para poner en marcha el acuerdo:
1. El presidente tendrá como responsabilidad la evaluación y priorización de los proyectos de inversión.
2. El titular del Ejecutivo será el responsable de facilitar la ejecución de los proyectos.
Para cumplir con estos puntos se realizarán reuniones periódicas conjuntas y métricas de seguimiento. En ese sentido, el presidente López Obrador ofreció abrir las puertas de Palacio Nacional a los empresarios para gestionar trámites y resolver dificultades.
"Que podamos empujar juntos al elefante reumático y mañoso que a veces es el Gobierno con sus trámites engorrosos y dilatados, todo eso que impide que las cosas lleguen a la práctica. Ofrezco eso", expuso López Obrador.
Salazar Lomelín dijo que "las inversiones no se dan en vacío. Quienes deciden poner a trabajar su dinero y arriesgar su patrimonio lo hacen sólo cuando existe un ambiente propicio con condiciones que lo incentiven.
3. Reglas y mensajes claros por parte de los sectores público y privado.
4. Estado de Derecho fuerte y eficaz.
5. Estabilidad macroeconómica.
6. Resolución con estricto apego al marco jurídico los obstáculos de ejecución que con frecuencia impiden la realización de proyectos de inversión.
El presidente del CCE también propuso fortalecer cuatro áreas prioritarias:
7. Fortalecer cuatro áreas prioritarias que comienzan con el sector energético,: se deben cumplir los contratos de inversión suscritos entre empresas y el sector público para incrementar la producción de petróleo, gas y energía eléctrica, fomentar las energías limpias y renovables, y coadyuvar a desterrar la corrupción en Pemex y en la Comisión Federal de Electricidad.
8. Mejorar conexión entre regiones mediante la infraestructura de transporte, en carreteras, puertos, puentes, ferrocarriles y aeropuertos.
9. Reforzar inversión social, en educación, salud, agua y saneamiento para lograr un desarrollo incluyente y sobre todo en el desarrollo del sur-sureste en energía, servicios, agroindustria, así como la integración de cadenas productivas.
10. La IP coadyuvará con propuestas de manera que el sector público genere condiciones de confianza para la inversión.
"Sólo lo lograremos (elevar la inversión pública) si se crea un ambiente propicio para la inversión, si los proyectos se pueden ejecutar de manera expedita con certeza y con transparencia", concluyó Salazar Lomelín.