Solo uno de cada 5 o 6 patrones apoya a los empleados con gastos relacionados con el trabajo en caso, como el pago de internet o de electricidad, y la ayuda promedia unos 350 pesos mensuales.
El apoyo a los colaboradores es una obligación humana pero también es un tema de productividad, afirmó Julieta Manzano, principal de Mercer México.
Destacó que el COVID vino a cambiar no solo la vida social, sino también la vida laboral, ya que detonó el teletrabajo, y este modelo mixto de trabajo en casa y oficina se dará también en la educación.
“Pocos soñaron que en 2021 se iba a ir poco a la oficina y menos que un médico nos fuera a hacer telemedicina”, precisó en la conferencia Las Nuevas Reglas del Juego, organizada por la Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos (Amedirh).
A pesar de que millones de personas trabajan en casa, “pocas empresas son las que activaron ya la ayuda económica para el teletrabajo, una de cada 5 o 6 empresas ya lo está dando”.
“La gran mayoría de empresas está reconfigurando su organización para definir quién va a caer en teletrabajo, quien sí va a estar 40 por ciento o más tiempo fuera del edificio, y quiénes van a estar dos días o un día fuera y el resto en la organización y no caen en la definición de teletrabajo”, abundó.
Precisó que las empresas están acabando de definir quién va a estar en el teletrabajo y quién no, para después activar una ayuda y una serie de políticas que deberán regir el teletrabajo, que serán fundamentales para que vayan con instructivo y con una especie de contrato nuevo de cómo serán las condiciones de trabajo”, detalló.
Debido a que muchas personas laborarán en casa, ya no se sabe que harán muchas empresas con el Mamut de Santa Fé, es decir con los edificios corporativos en donde acudían a diarios los empleados.
Al hacer un resumen de los principales cambios en 2021, expuso que surgieron 6 o 7 nuevas regulaciones en el tema de recursos humanos.
Fue la reforma de pensiones la que viene a encarecer el costo laboral en un lapso de 6 y 8 años.
El outsourcing se elimina por abuso, hay que reconocer que algunos sí lo usaron para pagar muy rasuradas prestaciones. El cambio implicó mayores costos para los empleadores y las utilidades bajaron al distribuirse entre más empleados.
La ley ahora solo permitirá contratar expertos para resolver cosas muy especializadas, como un abogado que va a atender una demanda.
Julieta Manzano afirmó que con el confinamiento por la pandemia, muchas cosas cambiaron y otras van a cambiar para siempre.
“Veo reuniones de líderes donde él es que habla, y no debe ser así, es momento de que el líder se calle, que lance dos o tres preguntas y guarde silencio para escuchar a su equipo”, subrayó. El líder debe estarse preparando para una nueva realidad.
El sector hotelero la pasó fatal. Renació el valor del turismo de experiencias. Se revaloró el salir al aire libre y el vivir experiencias fuera de casa. El sector de entretenimiento está muy golpeado.
“Cambió el diseño de las casas. Se busca algo de ventilación, de acceso al aire por medio de terrazas y áticos, y no tanto encierro; casas cada vez adoptando temas digitales, buscando tener conexiones de internet más robustas”, comentó.
“La bolsa de trabajo hoy es el mundo. Hoy ya no importa si te entrevisto en un país y trabajas en otro”, destacó.
“La inteligencia artificial se aceleró por mucho. Toda actividad repetible es robotizable”, dijo.
También surgió el ghost kitchen, personas que cocinan casas, sin tener que recibir a sus clientes, debido a que reparten a domicilio.
Estimó que los centros comerciales serán más reducidos. Los clientes podrían acudir a ver una prenda pero la compra la harán en línea.
Se observó la salida de Best Buy, negocio que se replanteó con la pandemia y en México ya vimos que cerró sus puertas.
“Otro de los temas fue tanta información. Hay mucho fake news, por lo que habrá nuevos lugares que buscarán información confiable, siempre mencionando fuentes porque hay mucha información chafa afuera. Por lo que es indispensable verificar datos y decir de dónde provino la información”, advirtió.
La época del big data llegó. Se deben conocer los números y las áreas de recursos humanos tienen mucha información.
También aumentó el ahorro o la intención de ahorrar. La gente consideró que tener un guardadito era importante.
En el tema del empleo, las organizaciones cada vez tendemos más a contratar actitudes que aptitudes, es decir se está prefiriendo a personas con mayor empuje y ganas de hacer las cosas que a aquellas con curriculum de estudios impresionantes.
Asimismo, se consideró más la norma que mide el nivel de estrés en los colaboradores.