Subirse a la ola digital es parte del proceso de transformación iniciada por Banco Invex, ya que tras poco más de dos años de pandemia, que trajo consigo una acelerada evolución digital para varios segmentos incluida la banca, la institución decidió apostar por una reconfiguración de su modelo de gestión para transformarse en un neobanco y así captar lo mejor de los bancos tradicionales y las Fintech.
Jean Marc Mercier, director general de Invex, explicó que en los últimos dos años se han dedicado a ajustar su capacidad operativa, tecnológica, de sistemas, talento y cultura para enfrentar el mundo digital que se vive, pues detectaron que hay un mercado de consumo y captación que no han atendido ni las Fintech, ni los bancos que ellos perfectamente pueden abarcar.
Aseguró que se definen a sí mismos como un neobanco, pues cuentan con un negocio 100 por ciento digital sin sucursales de por medio. Si bien toda su interacción con los usuarios es virtual, desde una apertura de cuenta y la solicitud de una tarjeta, no se limitarán a una experiencia online, pues no descuidarán a quienes opten por seguir con la colaboración personal.
“Lo que busca un cliente no es que lo digitalices por moda, lo que busca es que lo atiendas bien en el canal que él desee y en el momento que él considere. Eso es lo que básicamente se encuentra en Invex como neobanco, que seamos diferentes, flexibles, pero que también mantengamos lo que a la gente le gusta de los bancos, como la seguridad en datos, depósitos e identidad”, expresó el directivo bancario en entrevista.
Lo mejor de dos mundos
El banquero agregó que el hecho de que son una entidad financiera regulada y que están pendientes de lo que ocurre en materia de seguridad, es la parte que los fortalece de lado de los bancos; mientras que del negocio de las Fintech tomaron de inspiración cómo ponen en el centro al usuario para brindarle una experiencia positiva.
Sin embargo, aunque dijo que ni los bancos ni las instituciones de tecnología financiera son los ‘malos’ del sector, sí reconoció que en cuestión de volumen de clientes no es igual la atención de 300 a cientos o millones, pues se requieren cargas operativas y regulatorias. El directivo de Invex afirmó que este esfuerzo de digitalización será parte de su estrategia a desarrollar a lo largo de este año.
“Lo que queremos es atenderlos de manera diferente, como ellos lo necesitan, pero tampoco los queremos encajonar forzosamente en lo digital, como las aplicaciones de entrega de comida que nadie te atiende, te desesperas y le picas a la app y no puedes hablar con un humano. No queremos llegar a esos extremos de la digitalización, queremos llegar a lo que necesita el cliente en omnicanalidad, digitalización, personalización y experiencia”.
De la mano con subirse a la ola digital de los servicios financieros, con un enfoque de mejorar la inclusión de estos productos en el país, también está la seguridad que ofrezcan las instituciones para evitar fraudes o ataques cibernéticos que vulneren los datos de los usuarios. En este sentido, Jean Marc Mercier consideró que “no todas las Fintech lo están atendiendo como se debería”.
Por ello es que el área de ciberseguridad de Invex, dijo, es una parte fundamental dentro del banco que atiende cada contacto con el cliente. Resaltó que invierten muchos recursos en la materia, ya que su arquitectura tecnológica cambió radicalmente para que pueda ser segura, y por otro lado buscan brindar una buena experiencia y de alguna forma ser ágil y flexible a lo que demanda el cliente.
Previo a la realización de la 85 Convención Bancaria, la primera tras el confinamiento de 2020 por Covid-19, en Acapulco, Guerrero, el director general de Invex resaltó que el sector todavía enfrenta retos, pero que son menores a los vistos hace uno o dos años. Entre ellos están la inflación y asegurar que llegue la demanda del crédito asociado a las inversiones.
En franca recuperación
Para Mercier este es el año del inicio de la franca recuperación de la economía mexicana tras la pandemia, aunque ésta se dará de forma heterogénea siendo algunos sectores más beneficiados que otros, pues en general hay nueve meses de retraso en el avance para dejar atrás los impactos económicos de la crisis sanitaria.
“Es el inicio de la franca recuperación. No sé si vamos a llegar al punto prepandemia, lo que claramente hay es una inercia hacia la recuperación, no en todos los indicadores económicos, pero claramente hay un cambio de tendencia”, subrayó.