A casi dos meses de la entrada del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), implementado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, los panaderos no perciben beneficio alguno, por lo que no descartan que el ajuste de precios del pan se continúe haciendo conforme la inflación.
“Beneficios yo no diría que los haya, ya depende cada sector. Al final la inflación nos afecta a todos y a los industriales nos afecta en toda la cadena productiva, que también está la distribución, los combustibles, y una serie de cosas en toda la cadena de valor hasta llegar al consumidor”, dijo en conferencia José Luis Lechón, tesorero de la mesa directiva de Asociación Nacional de Proveedores de la Industria Panificadora (Anpropan).
En el marco de la presentación de Mexipan 2022, que se celebrará del 20 al 23 de julio, José Luis Lechón agregó que la presión del aumento de los costos en las materias primas es bastante complicado para todos en la industria y les presiona los márgenes en toda la cadena productiva.
El 4 de mayo el Gobierno Federal inició el PACIC, que consiste en apoyar a productores e industriales con el costo de combustible, así como estabilizar el precio de algunos productos de la canasta básica que, en el caso de los panaderos y reposteros, tendrían que haberse beneficiado en insumos como aceites y grasas vegetales comestibles, azúcar, huevo, leche pasteurizada, entre otros.
Entre mayo del 2019 y el quinto mes de 2022 el pan blanco incrementó su costo 34.12 por ciento, el pan dulce 32.38 por ciento, y el pan empaquetado 23.61 por ciento, arrojan datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Precios de alimentos continúan al alza
Por otra parte, José Ignacio Martínez Cortés, profesor y coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios, de la UNAM, explicó que del total de la Población Económicamente Activa (PEA), 19 millones 471 mil 398 personas perciben hasta un salario mínimo, lo que da un promedio mensual de 4 mil 816 pesos en ingresos. En este sentido, el valor de la canasta alimentaria urbana asciende a cerca de 2 mil pesos, por lo que invierten el 41.15 por ciento de un salario mínimo mensual para cubrir ese gasto.
“Son 38 millones 670 mil 234 personas que perciben un menor rendimiento de sus salarios ante el aumento de precios de productos básicos. Para el segundo semestre de 2022, este número de personas (el 67.84 por ciento de la PEA) cuyo ingreso no rebasa los dos salarios mínimos, estarán expuestos al incremento de la inflación que no contendrá el aumento de una tasa de interés que no está fomentando ni el ahorro ni el consumo”, señaló el catedrático.