La inflación de México escaló en julio a su mayor nivel en cerca de 22 años, al ubicarse en 8.15 por ciento anual, por lo que se espera que el Banco de México anuncie este jueves 11 de agosto un segundo aumento consecutivo de 75 puntos base a su tasa de interés clave.
El aumento de precios ha sido incontenible y poco han importado las nueve alzas de tasas consecutivas de Banxico para un total de 375 puntos básicos desde junio de 2021.
Ante esta situación, se pronóstica que el banco central mexicano pretende seguir subiendo la tasa de referencia y que evaluará tomar las mismas medidas si las condiciones lo requieren.
Al 10 de agosto, la tasa de interés de referencia de Banxico es de 7.75 por ciento.
“Banxico se preocupará por la gran lectura básica. Esperamos un aumento de 75 puntos básicos el jueves con riesgos de un aumento de 100 puntos básicos”, dijo Carlos Capistrán, economista jefe de Bank of America para México y Canadá.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha afirmado que sin el Paquete contra la Inflación y la Carestía (PACIC) que implemento en junio, la inflación sería 2.6 por ciento más alta.
Hasta el momento, este paquete contra la inflación ha representado un costo para el gobierno de 574 mil 624 millones de pesos.
Con todo e inflación, la economía de México creció
A pesar del aumento descontrolado de la inflación, la economía de México superó las expectativas de los analistas en el segundo trimestre, con un crecimiento de 1 por ciento frente a los tres meses anteriores.
No obstante, el producto interno bruto (PIB) aún no se ha recuperado a los niveles previos a la pandemia.
Los bancos centrales de América Latina ayudaron a prevenir una crisis cambiaria al iniciar fuertes aumentos de tasas el año pasado, lo que también ayudó a contener la inflación hasta en dos o tres puntos porcentuales, dijo en junio el director del Banco de Pagos Internacionales, Agustín Carstens.
Las principales economías de la región han tenido problemas para mantener bajos los precios, ya que la invasión rusa a Ucrania a fines de febrero ha hecho que los costos de los alimentos y la energía aumenten cada vez más, y debido a que los problemas en la cadena de suministro que han persistido durante la pandemia emergió de los negocios.