El Banco de México (Banxico) ajustó sus expectativas sobre la inflación y ahora considera que el índice regresará a su rango objetivo (3 por ciento, +/- un punto porcentual) hasta 2024.
La institución prevé que será en el primer trimestre de ese año cuando el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se coloque en 3.8 por ciento. El pronóstico previo del Banxico es que la inflación regresaría al rango objetivo en el último trimestre de 2023.
La institución hizo pequeñas correcciones a sus pronósticos sobre la inflación. Por ejemplo, prevé que cierre 2022 en 8.5 por ciento, cuando el cálculo previo era de 8.6 por ciento.
El Banco Central también recortó sus cálculos para 2023, pues ahora espera que la inflación abra el próximo año en 7.6 durante el primer trimestre; sea de 5.8 por ciento en el periodo abril-junio, y se coloque en 4.7 por ciento en el tercer trimestre.
La expectativa del Banxico es que el INPC cierre 2023 en 4.1 por ciento, una reducción de 10 puntos base respecto al pronóstico previo.
Sobre la inflación, el Banco Central reconoció que las presiones sobre los precios de productos primarios y las cadenas de producción han dado señales de ceder, aunque “la inflación global se mantiene elevada y persisten riesgos al alza”.
La institución ‘abrió la puerta’ a nuevas subidas a la tasa (que ya será de 10 por ciento), aunque subrayó que “valorará la magnitud de los ajustes al alza de sus próximas reuniones de acuerdo con las circunstancias prevalecientes”.
La decisión de la Junta de Gobierno de aumentar la tasa no fue unánime: la gobernadora Victoria Rodríguez y las subgobernadoras Galia Borja, Irene Espinosa y Jonathan Heath votaron por el alza de 75 puntos, mientras que Gerardo Esquivel, por un aumento de 50 puntos.