Economía

Inflación opaca las revisiones salariales; tienen su peor caída en 26 años

Durante 22, las revisiones salariales tuvieron descensos en siete meses.

Las revisiones salariales cayeron en términos reales en 2022. (Shutterstock)

Las revisiones salariales tuvieron una caída de 1.85 por ciento anual en términos reales en el 2022, siendo su caída más pronunciada desde 1996, muestran datos de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS).

Esta caída refleja que el avance de la inflación supera los incrementos nominales a los salarios de los trabajadores. En términos nominales el crecimiento fue de 6.0 por ciento.

En todo el 2022, siete meses mostraron un descenso en las revisiones salariales en términos reales, siendo la más profunda en octubre con -3.60 por ciento, que coincide con los niveles inflacionarios más altos del año pasado. Y también significó su caída más profunda desde marzo de 1997.

La inflación cerró en 7.82 por ciento anual el año pasado, y las expectativas para este año se perfilan a la baja, pero todavía a niveles fuera del rango objetivo de Banxico, que es de 3 por ciento +/- un punto porcentual.

Lo positivo de las revisiones salariales fue que, tanto en noviembre como en diciembre tuvieron un aumento de 0.54 y 0.52 por ciento, por primera vez desde inicios de 2021.

El número total de trabajadores involucrados en revisiones salariales en la jurisdicción federal ascendió a 1.77 millones en 2022, menor a los 2.22 millones del año previo.


“Para dimensionar los datos del total de trabajadores cubiertos por contratos colectivos de trabajo de jurisdicción federal, cabe señalar que representan el 19.4% de los trabajadores asalariados con contrato reportados en la ENOE y el 18% de los trabajadores asegurados permanentes registrados en el IMSS”, dijo la STPS.

La inflación ‘se relaja’ en 2023

Aunque la inflación finalizó el 2022 en un nivel de 7.82 por ciento, analistas prevén una moderación gradual en los próximos meses ante señales de menos presiones, para finalizar este 2023 cerca del 5.0 por ciento.

La inflación cerró el año en 7.82 por ciento con una tasa subyacente que disminuyó por primera vez en dos años.

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