Dado que el balance de riesgos de la inflación está al alza, es necesario que la postura monetaria restrictiva siga por un tiempo extendido hasta que surta el efecto deseado. Por lo tanto, no significa baja la tasa de interés a fines de año, manifestó Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México (Banxico).
Señaló que apenas fue en octubre del 2022 cuando alcanzaron una postura monetaria restrictiva y en el primer trimestre de este año lograron alcanzar un nivel suficiente para enfrentar el fenómeno inflacionario con una tasa de referencia en el nivel histórico de 11.25 por ciento, la cual se mantiene a la fecha.
“Tenemos una postura restrictiva, creemos que es aceptable y la queremos dejar ahí y esperar que surta efecto”, dijo.
En este sentido, el subgobernador sostuvo que “eso no significa que estamos ya pensando en bajar la tasa a fines de año”. Resaltó que un ajuste a la baja o mantener intacta la tasa dependerá de las expectativas de inflación.
“El periodo que pensamos nosotros que opera la política monetaria son como ocho trimestres. Yo creo que vamos a tener que mantener una postura restrictiva, posiblemente en todo el horizonte que dure estos efectos de la política monetaria”, argumentó.
Respecto a si seguirán el ritmo de la Fed, indicó que será la evolución de la inflación la que marque la pauta, pues aunque estarán muy atentos de cómo avance su postura monetaria, “no va a tener la importancia que pudo haber tenido en el transcurso del año pasado”, ya que Banxico tiene la tasa que buscaban.
Afirmó que las presiones globales están cediendo en cuanto a su contribución en la inflación, pero de forma local ven en el mercado laboral un riesgo importante, sobre todo por la alta probabilidad de otro aumento importante en el salario mínimo en enero de 2025.
“Todavía tenemos el problema de la persistencia de la inflación subyacente, los precios de los servicios no dan señales claras de que están realmente cediendo. Tenemos muchos problemas idiosincráticos, por ejemplo, los problemas de seguridad, distribuciones, cuellos de botellas en las aduanas. Tenemos toda una serie de cosas que en el margen alimentan estas mismas presiones (de la inflación)”.
Jonathan Heath hizo énfasis en que su objetivo es regresar a la inflación a tres por ciento (a la primera quincena de julio se ubicó en 4.79 por ciento anual), por lo que desde la Junta de Gobierno de Banxico deben hacer que esté en ese nivel, pues entre dos y cuatro por ciento solo es un rango.