En México, hay 42.6 millones de adultos sin ninguna cuenta en el sistema financiero en donde 11 millones han decido dejar de serlo y 31.6 millones nunca han sido usuarios, según reveló la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2015.
De los 11 millones que son exusuarios, el 50 por ciento dejaron de tener una cuenta porque dejó de trabajar y ya no la usaba para que le pagaran su salario, un 10 por ciento porque tuvo una mala experiencia con una institución financiera, un 10 por ciento porque no la utilizada y el 5 por ciento no cumplía con el saldo mínimo.
En conferencia de prensa para presentar los resultados de la segunda encuesta de este tipo que se realiza, Jaime González, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), aseguró que se ha tenido avances, ya que hoy el 68 por ciento de los adultos tienen al menos un producto financiero con el 56 por ciento en 2012.
Sin embargo, aún hay pendientes pues 24.1 millones de adultos no tienen ningún producto financiero, aunque en 2012 eran 30.9 millones de personas.
Existen 4.7 millones de adultos que son empleados u obreros y tienen derechos a servicios médicos del IMSS, ISSSTE, Pemex, Sedena o Semar pero no tienen cuenta de ahorro formal.
De los 33.6 millones de adultos con cuenta formal, 11.5 millones tienen únicamente mecanismos formales y 22 millones tienen también mecanismos informales.
La encuesta relevó que el 92 por ciento de la población adulta en México prefiere pagar en efectivo cuando realiza compras, el 84 por ciento de las personas que poseen una cuenta tienen una tarjeta de débito y el 61 por ciento prefiere pagar en efectivo que utilizar sus tarjetas, un 29 por ciento por costumbre, un 23 por ciento por desconfianza.
Economía