Economía

A propósito del yuan chino, esta es la historia del peso que los millennials quizá no conozcan

El Banco Central de China le 'mete mano' todos los días a su divisa, y esta semana se le 'pasó un poco', lo que provocó el enojo de EU.

Estados Unidos acusó esta semana a China de manipular su moneda después de que el yuan cayera a menos de 7 unidades por dólar, un mínimo de 11 años.

En respuesta, el Banco Popular de China (BPC) envió señales de que no permitirá una mayor caída del yuan con la herramienta que tiene, que es la fijación diaria.

El Banco influye en la moneda al establecer una tasa de referencia cada día de negociación a las 9:15 horas. Luego se permite que el yuan se mueva 2 por ciento en cualquier dirección.

Las tasas se calculan con fórmulas que tienen en cuenta factores como el cierre oficial del día anterior a las 16:30 horas, el movimiento del yuan contra una canasta de monedas y los movimientos en otros tipos de cambio importantes. En 2017, el BPC introdujo el llamado "factor contracíclico" para evitar una fijación que considere excesivamente débil o fuerte. Eso fue interpretado como un retroceso de la promesa de China de dar a los mercados un rol clave en la determinación del tipo de cambio.

Este sistema donde la divisa opera en una 'banda' también se ha aplicado en México, país que en diversas ocasiones y de distintas formas reguló su moneda en la segunda mitad del siglo pasado

Millennial, y no millennial, aquí te contamos la historia de estos casos:

Régimen de paridad fija (19 de abril de 1954 – 31 de agosto de 1976)

Durante varios años, previo a 1954, el dólar cotizó relativamente estable alrededor de los 8.65 pesos por dólar. Sin embargo, en 1954 se presentaron condiciones desfavorables para el país.

"Las dificultades que afectaron al normal desenvolvimiento de la economía norteamericana durante el año de 1954, provocaron incertidumbre y desajustes de cierta consideración en las actividades de numerosos países del mundo" , dijo ese año el Banxico en su informe anual.

En ese tiempo hubo una reducción dramática de las reservas del Banco, y para corregir estos desequilibrios, el 19 de abril de 1954 se devaluó la moneda nacional y se fijó en 12.50 pesos por dólar.

Este precio fijo duró más de 22 años

Sistema de flotación controlada (1° de septiembre de 1976 – 5 de agosto de 1982)

La paridad fija se mantuvo hasta septiembre de 1976 cuando se cambió a un sistema de flotación controlada.

El Informe Anual del Banco de México de 1976 menciona algunos factores que llevaron a esta decisión:

"La evolución de la economía durante 1976 fue desfavorable, ya que se registró una notable alza en la tasa de inflación (…) y una marcada reducción en el ritmo de la actividad económica.

"El público ahorrador empezó a mostrar una marcada preferencia por instrumentos bancarios de gran liquidez, y se inició un proceso de conversión de activos financieros en moneda nacional por activos en moneda extranjera. En 1976, facilitado por la liquidez alcanzada, este proceso se agudizó y el público mostró una clara tendencia a invertir sus ahorros en el extranjero"

Ante los desequilibrios mencionados se abandonó el sistema de tipo de cambio fijo y se estableció uno de flotación controlada a partir del primero de septiembre de 1976. Con el nuevo sistema, el Banco Central no necesariamente intervendría en el mercado de cambios para sostener el nivel del tipo de cambio, y sólo lo haría para "evitar fluctuaciones bruscas."

El tipo de cambio inició el régimen en niveles de 20.50 pesos por dólar y se ubicó en 48.79 al término del mismo.

Sistema cambiario múltiple (6 de agosto de 1982 – 31 de agosto de 1982)

Desde finales de 1981 y durante el año de 1982, la economía mexicana sufrió una fase de inestabilidad.

"La mayor inflación interna respecto de la externa, la dependencia de la economía de los ingresos petroleros y la caída en el precio del energético, afectaron adversamente las expectativas sobre el nivel futuro del tipo de cambio. Con ello se estimuló la conversión de pesos a dólares, se drenaron las reservas internacionales y, en última instancia, se provocó la devaluación de febrero de 1982", dice el informe anual del Banco Central de 1982

Por estas razones, a partir del 6 de agosto entró en vigor un sistema de tipo de cambio dual: uno "preferencial" y otro "general".

El preferencial se fijó en 49.13 pesos por dólar (con un desliz diario de 4 centavos, sin incluir sábados y domingos), se aplicaría a la importación de bienes prioritarios, como alimentos, y algunos insumos y bienes de capital requeridos para la actividad productiva. También se venderían al tipo preferencial los dólares destinados al pago de los intereses de la deuda externa pública y privada, y de las obligaciones del sistema bancario mexicano con el exterior.

El tipo de cambio general se determinaría por el libre juego de la oferta y la demanda de divisas, correspondientes a transacciones no comprendidas en el mercado preferencial.

"La reacción del público ante las modalidades del sistema dual fue de sorpresa y de incertidumbre respecto a la evolución futura del mercado de divisas. Así, en los días subsiguientes al anuncio del nuevo régimen cambiario, la cotización registrada en el mercado libre se movió al alza conforme se expandía la demanda de dólares", dice el informe del Banco.

El 12 de agosto se cerró el mercado de cambios para evitar que se agravara la situación. Posteriormente, al anunciarse la reapertura del mercado de cambios en los bancos a partir del 19 de agosto, se introdujo la operación de una tercera paridad entre el peso y el dólar. Dicha paridad, fijada en 69.50 pesos, debería utilizarse para liquidar obligaciones denominadas en moneda extranjera, y pagaderas en el país. Tales obligaciones se conocerían en adelante como 'mexdólares'

El tipo de cambio preferencial para el 12 de agosto y para el 19 de agosto fue de 49.29 y de 49.49 pesos por dólar, respectivamente.

Control generalizado de cambios (1° de septiembre de 1982 – 19 de diciembre de 1982)

Debido a movimientos especulativos en el mercado de divisas que erosionó las reservas internacionales, el 1 de septiembre de 1982 se decretó el control generalizado de cambios, con el que se abrogaron los tipos de cambio que existían en el régimen anterior.

El decreto publicado en el Diario Oficial estableció que el Banco de México determinará en qué casos se aplicará un tipo de cambio preferencial y en qué otros un tipo de cambio ordinario.

El tipo de cambio preferencial se utilizaría para el pago de deudas en México en moneda extranjera, o a instituciones en el extranjero, y para liquidar importaciones de bienes.

El tipo de cambio ordinario sería aplicable para calcular la equivalencia en moneda nacional tratándose de operaciones en moneda extranjera distintas al preferencial.

El tipo de cambio preferencial cotizó en 50 pesos por dólar hasta el 13 de diciembre de 1982, fecha en que la paridad se fijó en 70 pesos, mientras que el tipo de cambio ordinario lo hizo en 70 pesos por dólar hasta el 19 de diciembre de 1982.

Control de Cambios (20 de diciembre de 1982 – 4 de agosto de 1985)

Después del relevo presidencial en diciembre de 1982 se anunció un sistema de control de cambios que sustituía al control generalizado de cambios

Se fijaron dos tipos de cambio, uno controlado y otro libre. El primero se uso para pagos como la exportación de mercancías, pagos de las maquiladoras, pagos de deuda del Gobierno y empresas, e importaciones.

El libre se aplicó a la compraventa de dólares entre particulares.

Además, hubo un tipo de cambio 'especial' para deudas en moneda extranjera que se contrajeran antes del decreto.

La evolución de los distintos tipos de cambio a lo largo de estos años fue la siguiente:

Tipo de cambio controlado: con la entrada en vigor del nuevo régimen, cotizó en 95.00 pesos a la compra y en 95.10 a la venta, con un desliz diario (incluyendo sábados y domingos) de 13 centavos. El 6 de diciembre de 1984 se aumentó el desliz a 17 centavos diarios y el 6 de marzo de 1985, a 21 centavos diarios. Por último, el 25 de julio de 1985 se devaluó 20 por ciento y mantuvo el desliz de 21 centavos.

Tipo de cambio especial: se fijó a partir del día 20 de diciembre de 1982 en 70 pesos por dólar, sujeto a un desliz de 14 centavos diarios. El 16 de marzo de 1983 se decidió igualar el tipo de cambio especial con el controlado, debido a que muchos intermediarios financieros estaban sufriendo pérdidas cambiarias. En esta fecha, el tipo de cambio especial fue de 106.28 pesos, mientras que el controlado fue de 106.23 pesos por dólar. A partir de entonces, el desliz del tipo de cambio especial fue igual al del controlado, tanto en el monto como en las fechas en que se aumentó el desliz (incluso también fue devaluado en julio de 1985).

Tipo de cambio libre: se estableció para desalentar el mercado paralelo de divisas y cotizó el 20 de diciembre de 1982 en 148.50 pesos a la compra y en 150.00 pesos a la venta. Se mantuvo prácticamente constante hasta que el 22 de septiembre de 1983 se decidió introducir un desliz diario de 13 centavos. Después sufrió aumentos en el desliz, que de hecho fueron los mismos y en las mismas fechas que el tipo de cambio controlado, hasta que el 11 de julio.

Flotación Regulada (5 de agosto de 1985 – 10 de noviembre de 1991)

Hacia finales de 1985, se consideró que la política cambiaria que estaba vigente no tomaba en cuenta la evolución corriente y esperada de los agregados monetarios, ni su efecto sobre las reservas internacionales, ya que el tipo de cambio se movía uniformemente de acuerdo al desliz diario y no a las condiciones que en ese momento imperaban.

Por esta razón, se anunció un sistema de flotación regulada controlado, con el que diariamente se modificaban montos, para adecuar con flexibilidad y de manera gradual el nivel del tipo de cambio controlado a las circunstancias internas y externas, según el informe anual del Banxico de 1985.

El nuevo sistema no alteró el mercado libre, que ya no se deslizaba diariamente, pero modificó el mercado controlado con el "tipo de cambio controlado de equilibrio".

Para la determinación del tipo de cambio se llevaban a cabo en los días hábiles sesiones entre el Banco de México y las instituciones de crédito del país, en las que el Banco Central recibía posturas de cantidades para compras o ventas de dólares a un tipo de cambio anunciado previamente por el Banco, quien finalmente ajustaba el tipo de cambio anunciado hasta que se equilibraran oferta y demanda.

El tipo de cambio que resultaba de estas sesiones se publicaba al siguiente día hábil en el Diario Oficial de la Federación y aplicaba para solventar obligaciones denominadas en moneda extranjera dos días hábiles después de su fecha de determinación.

En este periodo de tiempo el tipo de cambio controlado inició en 282.30 pesos y terminó en 3 mil 73 unidades. El libre en 344.50 y concluyó en 3 mil 69.

Régimen de bandas cambiarias con desliz controlado (11 de noviembre de 1991 – 21 de diciembre de 1994)

Con el objeto de dar un estímulo adicional a los exportadores y a las empresas maquiladoras se abrogó el control de cambios a partir del 11 de noviembre de 1991 y se unificaron los dos mercados del tipo de cambio, el libre y el controlado.

El nuevo esquema consistía en dejar flotar al tipo de cambio dentro de una banda que se ensanchaba diariamente. Para esto, el piso de la banda se fijó en 3 mil 51.20 pesos por dólar, mientras que el techo presentó un ajuste diario (incluyendo sábados y domingos) a la alza de 20 centavos a partir de los 3,086.40 pesos. El 21 de octubre de 1992 incrementó el desliz del techo a 40 centavos diarios.

El tipo de cambio en este periodo inició en 3 mil 74 pesos, y concluyó en 3.99 de los nuevos pesos.

Libre flotación (22 de diciembre de 1994 – presente)

En 1994 ocurrieron varios eventos en México, como el levantamiento en Chiapas o el asesinato de Luis Donaldo Colosio, que provocaron inestabilidad en los mercados y terminaron con un ataque especulativo a las reservas internacionales del Banco de México a finales del año. Esto último llevó a la insostenibilidad del régimen de bandas cambiarias.

Por tanto, el 19 de diciembre de 1994 por la tarde, la Comisión de Cambios acordó abandonar el régimen cambiario para pasar a un régimen de flotación que inició tres días después.

"En el régimen de libre flotación, mismo que permanece hasta la fecha, el tipo de cambio se determina libremente en el mercado sin la intervención de las autoridades. Las operaciones que lleva a cabo el Banco de México en el mercado cambiario se hacen a través de mecanismos preanunciados y reglas ransparentes", explica el Banco Central.

Con información del Banco de México, Bloomberg y Reuters

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