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La promesa de un crecimiento económico promedio anual de 4 por ciento del presidente Andrés Manuel López Obrador se ha esfumado.
De acuerdo con las previsiones económicas de mediano plazo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la economía mexicana crecería apenas lo suficiente para generar un crecimiento promedio anual de 0.67 por ciento en el sexenio.
En sus Criterios Generales de Política Económica (CGPE), la dependencia a cargo de Arturo Herrera estimó que este año la economía tendrá un descalabro de –8.0 por ciento, principalmente por los efectos negativos de la pandemia de COVID-19. El próximo año, el rebote de la economía sería de al menos 4.6 por ciento, según sus previsiones.
A partir de 2022, la previsión de Hacienda es que la economía mexicana se estanque en un crecimiento de entre 2.6 y 2.5 por ciento al menos hasta 2026, el año más lejano para el cual realizó su previsión.
Con un crecimiento de 2 por ciento en 2018, una caída de –0.2 por ciento el año pasado y las previsiones mencionadas de la dependencia federal, el sexenio actual sería uno de los de peor desempeño entre los recientes.
Herrera afirmó durante la entrega del Paquete Económico 2021 en el Congreso de la Unión que el crecimiento del próximo año podría ser mayor si la vacuna para el COVID-19 se encuentra disponible pronto. Sin embargo, las estimaciones más optimistas la ubican hasta el segundo trimestre del año.
Asimismo, su estimación de una caída de –8.0 por ciento para este año es optimista. De acuerdo con la última encuesta de expectativas económicas de Citibanamex, el promedio de los principales bancos e instituciones financieras en el país anticipan que el golpe sea de –9.9 por ciento.
El Banco de México prevé que, en el mejor escenario, sea de -8.8 por ciento.
El presidente López Obrador aseguró antes de asumir su mandato que la economía mexicana crecería un promedio de 4 por ciento anual al cierre de su administración, sin embargo, las cosas no han resultado como esperaba.
La caída en la inversión privada y el freno en la inversión pública, por las medidas de austeridad implementadas, detuvieron la economía el año pasado, mientras que la pandemia de COVID-19 sumió al mundo en una de las crisis más profundas de las que se tenga memoria.
El mandatario ha asegurado en reiteradas ocasiones que él mantiene el optimismo y su promesa de crecimiento económico sí se materializará.
Otro punto negativo que resaltó Hacienda en sus predicciones es la deuda total del país, conocida como el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP), que cerrará el año por primera vez arriba de 50 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), en 54.7 por ciento.
El resto del sexenio y hasta 2026, la deuda total del país permanecerá arriba de 52 por ciento. Hacienda ha afirmado en sus informes trimestrales de finanzas públicas al Congreso de la Unión que este aumento de la deuda nacional se debe más bien a la depreciación del peso frente al dólar.
En tanto que, según los CGPE, el crecimiento económico promedio anual de México en el periodo 2020-2026 será de apenas 1.3 por ciento.
En otras variables, Hacienda estimó que la inflación en el país se mantendrá en el objetivo del Banco de México (Banxico) de 3 por ciento, mientras que el tipo de cambio oscilará entre los 22 y 22.9 pesos por dólar a lo largo de los siguientes seis años.