La Agencia Internacional de Energía recortó los pronósticos para la demanda de petróleo ante las nuevas restricciones por el virus, y advirtió que el avance en las vacunas no reanimará los mercados a corto plazo.
Los precios del crudo subieron a un máximo de 10 semanas, a más de 45 dólares, esta semana debido a las noticias del progreso de Pfizer, pero el uso de combustible no experimentará ningún impulso "significativo" por las vacunas hasta el segundo semestre del próximo año, dijo la agencia.
La AIE, con sede en París, que asesora a la mayoría de las principales economías, redujo las proyecciones de la demanda de petróleo para este trimestre, en 1.2 millones de barriles diarios.
La vacilante perspectiva del consumo, junto con el aumento de la oferta en lugares como Libia, está presionando al cartel de la OPEP y sus aliados mientras se preparan para reunirse en algo menos de tres semanas, dijo la agencia.
La alianza OPEP+, liderada por Arabia Saudita y Rusia, inicialmente tenía como objetivo restablecer parte de la oferta que no está produciendo a principios del próximo año, pero ahora se está centrando cada vez más en un retraso de esa medida.
"Dado que es poco probable que la vacuna de COVID-19 vaya a rescatar al petróleo durante un tiempo, una demanda más débil junto con el aumento de la oferta de petróleo presenta un contexto difícil", apuntó la AIE en su informe mensual. "A menos que los fundamentos cambien, la tarea de reequilibrar el mercado tendrá un progreso lento".
Existencias infladas
Si la OPEP+ sigue adelante con el aumento de la oferta de casi 2 millones de barriles por día en enero, los productores no agotarán los inventarios de petróleo durante el primer trimestre, advirtió la agencia. Reducir las existencias, infladas por el colapso de la demanda de este año, a niveles normales ha sido uno de los objetivos clave de la coalición.
Los datos para el tercer trimestre ahora disponibles sugieren que los inventarios apenas disminuyeron una tercera parte de la cantidad prevista, con una reducción de 800 mil barriles al día, dijo la AIE.
El consumo mundial de petróleo se encamina a una caída sin precedentes de 8.8 millones de barriles diarios este año, a una media de 91.3 millones por día, según la AIE. También recortó las estimaciones para 2021, reduciendo su proyección del primer trimestre en 700 mil barriles por día, aunque la demanda aún se encamina a un repunte de 5.8 millones de barriles de media el próximo año.
Además del problema de un deterioro de la demanda, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) también tiene que lidiar con un sorprendente repunte de la oferta. La producción mundial podría alcanzar el millón de barriles por día este mes a medida que Estados Unidos se recupera de los trastornos de los huracanes y Libia reanuda las exportaciones, indicó la agencia.
Libia, una de las tres naciones de la OPEP exentas del acuerdo de límites a la producción, triplicó su volumen a 450 mil barriles por día el mes pasado a medida que se calmaba su agitación política, informó la AIE. Ahora produce más de 1 millón de barriles al día, y podría alcanzar una media justo por debajo de ese nivel en noviembre, anticipó la agencia.