CIUDAD DE MÉXICO.- Entre marzo y agosto de este año, el Banco de México vendió 14 mil 805 millones de dólares de sus reservas, por lo que obtendría unos 37 mil 101 millones de pesos como monto a favor, de acuerdo con cálculos realizados por El Financiero.
Debido al mecanismo de subasta generaría recursos que entregaría a la Secretaría de Hacienda en forma de remanente, que ayudarían a subsanar los ingresos federales para el próximo año.
Fausto Hernandez, académico del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), explicó que el mecanismo se puede utilizar y que sería de ayuda en el próximo ejercicio, aunque alertó que el ajuste necesario en 2016 es realmente importante "el monto que sea debe de ayudar, aunque no resuelve el problema del recorte que tendrá que hacer el gobierno federal".
No obstante para Gabriel Casillas, director de análisis de Banorte y exfuncionario de Banxico, comentó que el remanente que pudiera existir al final de año sería por la valuación de las reservas en pesos, por efecto del tipo de cambio, no por la subasta "la gente tiene que entender que el remanente es por efecto del tipo de cambio (…) y Banxico puede decidir si transferir los recursos o no a la SHCP", añadió.
Moody's estimó que para 2016 la SHCP tendría que recortar un 0.7 por ciento del PIB sus egresos. En tanto estos 37 mil 101 millones obtenidos por las ventas representarían un 0.2 por ciento del PIB al segundo trimestre del año.
Por su parte, Marco Oviedo, exfuncionario de la Secretaría de Hacienda, comentó que es muy posible que se utilice la herramienta y que esto genere un apoyo a Hacienda.
RESTA PRESIÓN
El objetivo de las subastas de dólares que realiza el Banco de México en el mercado cambiario es el de restar presión a la moneda mexicana y no el de hacer dinero por lo que no "malbarata" las reservas del país, opinó Charles Kane, profesor senior de Finanzas Internacionales y Estudios de Emprendurismo en la MIT Sloan School of Management en Cambridge, Massachusetts.
Según el especialista, la principal fuente de presión para el peso mexicano proviene de la caída en los precios del petróleo, y el banco central la ha enfrentado interviniendo mediante la venta de dólares y la compra de pesos.
"Los bancos centrales suelen romper esas ventas en muchas de las transacciones con el fin de evitar un precio más bajo sobre la venta . Ellos tratan de establecer un precio "piso", pero no es el trabajo de un banco central hacer dinero, más bien, es su trabajo "equilibrar" las presiones del mercado y trata de frenar una fijación de precios a la baja del peso en los mercados abiertos", agregó Kane.
Enfatizó que el objetivo del Banxico no es lucrar en los mercados de divisas, sino aliviar la presión que sufre el peso.