El Banco de México (Banxico) redujo el jueves su tasa de interés en 50 puntos base, en línea con lo esperado por el mercado, y los analistas prevén ajustes adicionales en los próximos meses de 100 puntos, con lo que cerraría el año en 4.5 por ciento.
Con el nuevo recorte, el cuarto en lo que va de 2020, el referencial quedó en 5.50 por ciento. La decisión de la Junta de Gobierno de la institución fue unánime.
La tasa de interés del Banco Central no estaba en un nivel similar desde diciembre de 2016, cuando Banxico decidió aumentar el referencial de 5.25 a 5.75 por ciento.
De los cuatro recortes a la tasa en 2020, tres han sido en el marco de la pandemia de COVID-19. Previo al del jueves, el Banco Central hizo dos bajas de 50 puntos base en reuniones extraordinarias.
En su comunicado de Política Monetaria, la autoridad monetaria advirtió que se espera una importante contracción en la actividad económica y en el empleo en el segundo trimestre a causa de los efectos de la pandemia del COVID-19, y señaló que es necesario adoptar acciones monetarias y fiscales, para contribuir a un mejor ajuste de los mercados financieros y de la economía.
"Si bien aún se desconocen la magnitud y la duración de las afectaciones ocasionadas por la pandemia, se anticipa que estas se profundicen en el segundo trimestre y den lugar a contracciones importantes en el empleo. Así, las condiciones de holgura continúan ampliándose considerablemente, en un contexto en el que el balance de riesgos para el crecimiento está significativamente sesgado a la baja", agregó.
La institución reconoció que la propagación del virus SARS-CoV-2 ha llevado a diversos bancos centrales en el mundo a reducir sus tasas de interés ante la contracción que se espera para sus economías en 2020 y la caída en los precios de las materias primas como el petróleo.
Los analistas económicos coincidieron en que el banco central mexicano aún tiene espacio para seguir reduciendo la tasa de interés.
Gabriel Casillas, economista en jefe de Banorte, indicó que se anticipan más ajustes, los cuales serían de 50 puntos base en al menos dos ocasiones más y estos ya estarían descontados por el mercado.
"El mercado ya lo trae descontado, inclusive si se fuera a 4.5, en 2 meses más ya el mercado lo tiene descontado y no veríamos un efecto importante en el tipo de cambio", dijo a El Financiero Bloomberg.
"Esperamos que el banco central (de México) se relaje aún más en las próximas reuniones y reduzca la tasa al menos a 4.50 por ciento para fines de 2020 (riesgo cada vez más sesgado hacia un nivel más bajo). Esto aún preservaría un atractivo nivel diferencial de tasas de interés entre México y Estados Unidos", apuntó Alberto Ramos, economista en jefe de Goldman Sachs.
Ernesto O'Farrill, presidente de Bursamétrica, coincidió que "el mercado ya está descontando un piso de entre 4.5 a 5 por ciento", por lo que, las siguientes acciones de Banxico se darán con cautela.
Para Citibanamex, sorprende la reticencia del banco central de ajustar su narrativa de forma más clara y proveer mayor guía a los mercados sobre las acciones futuras de la política monetaria, cuando las revisiones a la baja en las expectativas de crecimiento no tienen precedente y el impacto negativo en el empleo es evidente.
"En ausencia de este tipo de cambios en su retórica, continuamos previendo que la tasa de política alcanzará 4.5 por ciento hacia agosto, si bien consideramos que es necesario mucho más soporte monetario y fiscal", indicaron.
En el primer trimestre de 2020, el Producto Interno Bruto (PIB) de México se contrajo 2.4 por ciento anual, según la estimación oportuna del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicada el 30 de abril.
Esta caída podría ser aún más pronunciada en el segundo trimestre de 2020. Analistas consultados por el Banxico estiman que la contracción puede ser de hasta 14 por ciento anual para el periodo abril-junio por los efectos de las medidas de distanciamiento social y el paro de actividades no esenciales determinados para reducir la velocidad de propagación del COVID-19.
Ante esto, el Banco Central anunció en abril 10 medidas adicionales por un monto de hasta 750 mil millones de pesos para apoyar el funcionamiento del sistema financiero.
Entre las acciones se incluyó un programa de hasta 250 mil millones de pesos para proveer de recursos a instituciones bancarias que puedan ser utilizados en créditos a micro, pequeñas y medianas empresas, y a personas físicas afectadas por la pandemia del COVID-19.
Necesarios, estímulos fiscales
En su anuncio, Banxico señaló que perseverar en fortalecer los fundamentos macroeconómicos y adoptar las acciones necesarias, tanto en el ámbito monetario como fiscal, contribuirá a un mejor ajuste de los mercados financieros nacionales y de la economía.
Los analistas indicaron que Banxico necesita el apoyo de la política fiscal para dar respiro a la actividad económica del país, porque, si bien el banco central tiene espacio para seguir reduciendo las tasas de interés, estarán llegando pronto al límite contemplado.
O'Farrill destacó que en México "se está dejando sola a la política monetaria para atenuar esta crisis", pues los integrantes de Banxico reconocen que en otros países se han instrumentado medidas de estímulos fiscales para atenuar los efectos adversos en el empleo y en los ingresos de hogares y empresas.
Alejandro Saldaña, economista en jefe de Ve Por Más, señaló que "Banco de México ha repetido en las últimas oportunidades la importancia del actuar monetario, pero también del fiscal para tratar de combatir los efectos de la pandemia y tratar de generar cierta estabilidad en las condiciones macroeconómicas".
James Salazar, subdirector de análisis de CIBanco, señaló que la decisión de recorte en la tasa de interés estuvo en línea con las expectativas, y además coincidió en que difícilmente bajando la tasa se estimulará la economía, pues hacen falta políticas fiscales. Indicó que con los recortes Banxico está aprovechando la coyuntura para bajar la prima que se paga por los activos denominados en pesos.
Con información de Jeanette Leyva y Guillermo Castañares.