El bajo crecimiento económico del tercer trimestre confirma el estancamiento de la actividad productiva del país, lo cual pone presión a las finanzas públicas, advirtieron calificadoras.
La analista sénior de riesgo soberano de Moody's, Ariane Ortiz-Bollin, destacó que la agencia calificadora recientemente revisó a la baja su expectativa de crecimiento económico de 0.5 a 0.2 por ciento para el cierre de 2019, pero los nuevos datos que salieron sugieren que este 0.2 por ciento tiene importantes riesgos a la baja.
"Si bien la actividad económica trae una tendencia muy a la baja, esperábamos que tanto la inversión como el consumo se estabilizara, pero no fue el caso y por lo cual el 0.2 por ciento tiene riesgo a la baja, y por esto existe el riesgo para las finanzas públicas", mencionó.
Félix Boni, director de Análisis de la agencia de calificación crediticia HR Rating, destacó que el bajo crecimiento del país pone en riesgo a las finanzas por dos frentes: El indicador de la deuda respecto al PIB y el déficit fiscal.
Detalló que si no hay un crecimiento suficiente no se podría evitar un incremento relevante en la deuda. Además, "podríamos tener un ciclo vicioso, de que si estamos limitados a un déficit de 2 por ciento del PIB, y si la economía no crece, y no se puede exceder ese déficit, entonces la respuesta sería que el gobierno tendría que recortar más el gasto", dijo Boni.