Utilizar todo el espacio fiscal y tener flexibilidad para asegurarse de que el dinero vaya donde se necesite durante la pandemia son algunas de las opciones de política que el Premio Nobel de Economía 2001, Joseph E. Stiglitz, recomendó para que países latinoamericanos como México puedan salir de la crisis por el COVID-19.
La salud es lo primordial, destacó Stiglitz, advirtiendo que primero se debe mitigar la crisis sanitaria y después controlar el panorama económico.
"Pensar más detenidamente sobre cómo se está gastando el dinero. Tiene que haber flexibilidad, redirección, para asegurarse de que el dinero vaya donde se necesite específicamente durante la pandemia. Así que la salud es la prioridad número uno, proteger a los más vulnerables. Esta pandemia está afectando a diferentes grupos y sectores de manera muy diferente", aseveró el experto.
El economista detalló que uno de los primeros pasos para la economía nacional es utilizar todo el espacio fiscal que tienen. En entrevista para el podcast Norte Económico, mencionó que "algunos tipos de gastos tienen multiplicadores más grandes, es decir, el valor del dólar o del peso es mayor en algunos países, así que hay que pensar dónde el dinero tendrá un mayor impacto para salir de la pandemia".
La tercera recomendación que señaló es que "habrá una escasez de recursos, tenemos que pensar cómo abordar los problemas de salud, ayuda a que la economía se dirija hacia la economía del futuro".
Para el doctor Stiglitz, promover la ciencia y el conocimiento es diseño de políticas para promover la productividad, creatividad y vitalidad de las personas como verdaderas fuentes de riqueza para recuperar el crecimiento y disminuir la desigualdad.
"Mucho tiene que ver con absorber este conocimiento de otros. Lo que separa a los países desarrollados de los países en vía de desarrollo no solo es una disparidad de recursos, también una disparidad de conocimientos", agregó.
Resaltó que cerrar la brecha de conocimiento es algo muy importante, sobre todo para mejorar las condiciones de vida. Pero la brecha de conocimiento se tiene que cerrar para toda la sociedad.
"Creo que ahí está el desafío, cerrar la brecha dentro de los países y cerrar la brecha para el ciudadano promedio y para países vecinos".
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