Desde hoteles de cinco estrellas hasta podios de Fórmula Uno, la champaña es para muchos el pináculo de las bebidas alcohólicas y es uno de los productos más famosos de Francia, el país exportó más de 306 millones de botellas de 750 mililitros en todo el mundo el año pasado.
El Reino Unido es el país con más 'sed' por esta bebida ya que importó 31.2 millones de botellas en 2016, ningún otro lugar realmente se acercó. Según cifras del Comité Champagne, el segundo destino con más demanda fue Estados Unidos con 21.8 millones de botellas cruzando el Atlántico en el período de doce meses.
En México, el consumo de bebidas premium como la champaña tuvo un incremento del 12.2 por ciento en 2016, según la agencia de investigación de mercados Euromonitor, pero no es suficiente para figurar en el mercado internacional que importa esta bebida.
Aquí una radiografía del mercado del champán en el mundo:
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