La propuesta de reforma al sistema de pensiones de los que cotizan en el IMSS, y que envió el Poder Ejecutivo al Congreso, está muy centrada en beneficio del trabajador, afirmaron expertos.
Moisés Pérez Peñaloza, especialista en sistemas de pensiones, sostuvo que la propuesta mantiene la cuota de los trabajadores; hay una redistribución de la cuota social para los sueldos más bajos; y se eliminan trámites muy complejos judiciales al fallecer los titulares.
"Es una propuesta muy centrada en beneficio del trabajador, pero con algunos tintes delicados en la forma en cómo se está presentando e intentando algunos beneficios", reconoció Peñaloza.
Destacó además el incremento de la pensión mínima garantizada, también a favor de los trabajadores, así como la liquidez inmediata en las aportaciones voluntarias.
En tanto, las primeras generaciones cercanas a comenzar a solicitar sus pensiones, bajo la Ley de 1997, que se hubieran llevado una negativa, podrán aspirar a un cálculo de pensión, sostuvo Rolando Silva, presidente de la Comisión de Seguridad Social del Colegio de Contadores Públicos de México.
A raíz de que tres cuartas partes de los cuentahabientes del Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) no tendrá derecho a una pensión al llegar a la edad de retiro, la iniciativa para reformar la Ley de IMSS y de la Ley del SAR, propone modificar el requisito mínimo de semanas cotizadas, de mil 250 a 750 semanas desde el día uno que entre en vigor, con un incremento progresivo a mil semanas hacia el 2031; así como se sugieren adecuaciones a la pensión mínima garantizada y, adicionalmente, se integrarán a los beneficios del SAR la Pensión para el Bienestar de los Adultos Mayores.
"Las personas que busquen una pensión en el 2021 con 750 semanas y tengan un salario cercano a cinco UMAS, se van a llevar casi seis mil 181 pesos", describió Silva.