CIUDAD DE MÉXICO.- El dicho popular dice que el dinero no compra la felicidad, tal vez sea por eso que a pesar de que 2014 fue un año que quedó a deber en materia de salarios y creación de nuevos empleos, la mayoría de los mexicanos se siente feliz al tener más experiencias positivas que negativas en un "día normal".
Trabajar se percibe como uno de los principales factores para ser feliz. El estudio de Adecco "Felicidad, ¿un tema ligado al empleo?" muestra que para 82 por ciento de las personas cumplir objetivos y trabajar, influye en su felicidad, mientras que para 61 por ciento el estatus económico y profesional ligado al trabajo también contribuye a sentirse feliz.
Adecco considera que la felicidad es un tema que hay que trabajar en y con las empresas, además, el cerebro está mejor preparado cuando se es feliz, "si soy feliz trabajando aguanto mejor el drama del estrés, lidero mejor y tengo mejores resultados".
En México, el ingreso familiar disponible neto promedio per cápita es de 12 mil 850 dólares al año, cifra menor que el promedio de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) de 23 mil 938 dólares, que coloca a nuestro país en la posición 34 de 36 países de este bloque.
En términos de empleo, alrededor de 61 por ciento de las personas de 15 a 64 años de edad en México tiene un empleo remunerado, cifra menor que el promedio de la OCDE de 65 por ciento.
Además de salario y empleo, hay otros factores que influyen en la felicidad laboral de los mexicanos. De acuerdo con Kelly Services, 31 por ciento de los empleados piensa ocasionalmente en dejar su trabajo, 58 por ciento busca otra alternativa de trabajo pese a estar felices en su situación actual y 63 por ciento dice que sus líderes directos tienen un impacto significativo en su nivel de satisfacción y compromiso.
Por ende, el Índice para una Vida Mejor muestra que 82 por ciento de los mexicanos están más satisfechos con su vida, superior al promedio de la OCDE de 76 por ciento, pues en un día normal reportan más alegrías que sentimientos de dolor, tristeza o preocupación.
Bajo esos parámetros 2015 podría ser el año más feliz de su vida.