El Banco de México (Banxico) tiene como cometido entregar una parte del excedente operativo del ejercicio de 2020 al Gobierno federal, sin embargo, se corre el riesgo de que, debido a la recuperación del peso en los últimos meses, la utilidad de la autoridad monetaria se reduzca drásticamente.
Expertos coincidieron en que a inicios de la pandemia se hablaba de un remanente cercano a 500 mil millones de pesos por la depreciación del peso, que llegó a superar los 25 por dólar, pero con el fortalecimiento de de la moneda frente a esa divisa, el remanente disminuiría hasta los 300 mil millones de pesos.
Carlos Capistrán, economista en jefe para México y Canadá para Bank of America Securities, dijo que el remanente cerró cerca de los 300 mil millones de pesos, pero existen varias limitantes, entre las que se encuentra el pago de las pérdidas que la autoridad monetaria tenga de años previos.
"Banxico, una vez que ve cuánto dinero tiene de esta ganancia cambiaria por reservas tiene que, primero, pagar las pérdidas que pudiera tener acarreando de años pasados", expuso.
Comentó que la Junta de Gobierno tendría que decidir en abril cuánto le otorgaría al gobierno. "Está entre cero y 300 mil millones de pesos, que es cerca del 1.5 por ciento del PIB lo que le pase de remanente Banxico a Hacienda", aseveró el especialista.
El remanente se calcula después del cierre del año, en el balance anual del banco central, y lo debe entregar íntegro al gobierno federal, una vez constituidas las reservas previstas en la Ley. Su monto es cercano al saldo de las reservas, que cerraron en año en 195 mil 667 millones de dólares, por 1 peso, que aumentó en el año el precio del billete verde, que resultaría en unos 208 mil millones de pesos.
Ernesto O'Farrill, presidente de Grupo Bursamétrica, indicó que el remanente sería cercano a los 190 mil millones de pesos dado que solo hubo una depreciación de casi un peso en el tipo de cambio.
"De los 190 mil millones de pesos Banxico se queda al menos con el 30 por ciento para reservas, entonces le quedaría al Gobierno federal aproximadamente 133 mil millones, de esos puede aplicar el 70 por ciento para aplicar el Fondo de Estabilización, serían 93 mil 100 millones, y el 30 por ciento restante, 39 mil 900 mdp al pago de la deuda pública".
Ven riesgo de que no lleguen
Ariane Ortiz-Bollin, VP-Senior Analyst de Moody's Investors Service, dijo que el remanente de Banxico podría no ser entregado al Gobierno federal dada la fortaleza del peso frente al dólar.
"Dado que el peso cerró cerca de 20 pesos, es decir, no tan distinto a como cerró en 2019, es muy posible que ya este remanente no se materialice y que el gobierno no vaya a poder contar con este excedente", aseveró.
Añadió que el Gobierno federal se mostró muy optimista en el presupuesto pues consideraban que se podía compensar con el remanente de Banxico, sin embargo, esta situación ya es muy difícil de materializarse.
"Como pensamos que el gobierno estaba siendo muy optimista en algunas cosas en su presupuesto, iba a haber entonces un faltante para poder cumplir con sus metas fiscales y este se iba a compensar con este remanente, y es muy posible que esto ya no sea el caso", acotó.
Rafael de la Fuente, economista en jefe de UBS para Latinoamérica, indicó en un reporte que la apreciación del tipo de cambio limita la transferencia del excedente del banco central al gobierno.
"La probabilidad de una transferencia se verá limitada aún más por la volatilidad del peso y la perspectiva de una mayor apreciación de la moneda, una eventualidad contra la que Banxico querrá reservar", dijo.
Añadió que el artículo 53 de la Ley de Banxico estipula que el organismo central debe apuntar a preservar el valor real de su capital y las reservas.
"Debido a que Banxico terminó 2019 con patrimonio negativo, su primer uso de cualquier ganancia será para recapitalizarse. Dos, una vez que Banxico ha alcanzado su nivel de capital deseado, también debe constituir reservas para protegerse del riesgo de una revaluación cambiaria", enfatizó, por lo que considera que luego de estas medidas no quedarán ganancias para ser entregadas al gobierno.