WASHINGTON.- El crecimiento económico de Estados Unidos se desaceleró en el cuarto trimestre más de lo que se había estimado inicialmente, debido al lento ritmo de acumulación de inventarios por parte de las empresas y por un déficit comercial más amplio, pero los fundamentos subyacentes continuaron sólidos.
El Producto Interno Bruto (PIB) se expandió a un ritmo anual de 2.2 por ciento, una rectificación a la baja desde la tasa de 2.6 por ciento estimada el mes pasado, informó el Departamento de Comercio.
La revisión estuvo en general en línea con las expectativas de los analistas.
En el tercer trimestre del año pasado, la economía había crecido a un ritmo muy fuerte de 5.0 por ciento.
Pero la moderación del período posterior probablemente sea temporaria, ya que el consumo se aceleró al ritmo más veloz desde el primer trimestre de 2006 mientras que otras mediciones de la demanda doméstica también reflejaron avances importantes.
El crecimiento del consumo, que explica más de dos tercios de la actividad económica estadounidense, fue rectificado a la baja en una décima de punto porcentual a una tasa de 4.2 por ciento en el cuarto trimestre, que de todos modos fue la más rápida desde el primer período de 2006.
El ajuste del mercado laboral y la caída de los precios de la gasolina también seguirían apuntalando a la demanda doméstica y ayudando a la economía a atravesar un momento difícil para el resto de la economía global.
La inversión empresarial en equipos fue revisada para mostrar un aumento a un ritmo de 0.9 por ciento en lugar de la contracción reportada anteriormente de 1.9 por ciento.
Ahora se espera una aceleración de la actividad en el primer trimestre, pues los datos del jueves exhibieron un repunte de las intenciones del gasto empresarial en enero tras cuatro meses seguidos de declives.
Las empresas acumularon inventarios por valor de 88 mil 400 millones de dólares en el cuarto trimestre, mucho menos que los 113 mil 100 millones de dólares que había estimado el gobierno el mes pasado.
Eso resultó en que la contribución al crecimiento del PIB derivada de los inventarios fuera revisada a la baja, a una décima de punto porcentual, desde los 0.8 puntos porcentuales calculados antes.
Sin embargo, el ritmo más lento de acumulación de inventarios será un impulso a la expansión del PIB del primer trimestre.
La fuerte demanda doméstica absorbió más importaciones de lo reportado anteriormente, resultando en un déficit comercial, que sustrajo 1.15 puntos porcentuales del crecimiento del PIB. Anteriormente se había calculado un impacto algo menor, de 1.02 puntos.
El gasto en construcción residencial fue revisado a la baja mientras que el gasto del gobierno no estuvo tan flojo en el cuarto trimestre como se había estimado inicialmente.