Las exportaciones mexicanas ascendieron a 37 mil 221 millones de dólares durante septiembre, lo que representó una disminución de 1.27 por ciento anual, su mayor contracción desde octubre de 2016, informó este lunes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Esta caída se derivó en gran medida por la desaceleración de exportaciones no petroleras destinadas a Estados Unidos, principal mercado nacional, ya que durante el 'mes patrio' se observó un crecimiento de 2.1 por ciento, dato inferior a los avances de 4.1 y 10.6 por ciento observados durante agosto y julio, respectivamente.
Durante 2019, la economía de Estados Unidos, principal socio comercial para México, ha mostrado signos de desaceleración, al pasar de un crecimiento de 3.1 por ciento durante el primer trimestre de 2019 a uno de 2.1 por ciento en el segundo trimestre.
Además, la actividad manufacturera de aquel país continuó débil, afectada en buena medida por la guerra comercial con China, por lo que analistas de Grupo Financiero Banorte prevén que el sector se mantenga en contracción ante un complejo entorno global.
De manera desagregada, las exportaciones no petroleras reflejaron un avance de 0.95 por ciento, su menor nivel en seis meses. Este comportamiento obedeció a la desaceleración de los envíos manufactureros, pilar de las exportaciones mexicanas, al crecer únicamente 0.82 por ciento, dato menor al 3.71 por ciento de agosto.
Los crecimientos anuales más importantes se observaron en las exportaciones de alimentos, bebidas y tabaco (16.1 por ciento), de productos de la minerometalurgia (14.7 por ciento), de equipo profesional y científico (7.2 por ciento) y de maquinaria y equipo especial para industrias diversas (5.5 por ciento).
En contraste, las exportaciones de productos automotrices mostraron un descenso anual de 2.8 por ciento, el cual fue resultado de retrocesos de 2.2 por ciento en las ventas canalizadas a Estados Unidos y de 5.3 por ciento en las dirigidas a otros mercados, puntualizó el Inegi en su reporte mensual.
A su vez, las exportaciones petroleras cayeron 29.32 por ciento, derivado en gran medida por las reducciones observadas en los envíos de petróleo crudo (31 por ciento) y de otros productos petroleros (15.42 por ciento).
Por otra parte, las importaciones mexicanas sumaron 37 mil 338 millones de dólares, lo que significó una contracción anual de 1.75 por ciento y su segundo mes consecutivo a la baja.
De manera particular, las compras de bienes de capital (productos que ya están preparados para producir o consumir) se redujeron 13.5 por ciento a tasa anual, por lo que ya sumaron un semestre en contracción.
Los bienes de consumo (aquellos productos que se utilizarán en el día al día como lo son los alimentos o bienes duraderos) cayeron 3.8 por ciento anual, y los bienes de uso intermedio (aquellos que se emplean para ser transformados o incorporados a la producción de otros bienes) registraron una variación de 0.2 por ciento.
En el intercambio comercial, México obtuvo un déficit de 116 millones dólares. Este fue apenas el tercer saldo negativo en lo que va del año.