Perder 4 mil 300 millones de barriles de reservas podría ser exactamente lo que necesitaba Exxon Mobil Corp.
La noticia llega inmediatamente después de que Exxon sufriera una depreciación de activos de dos mil millones de dólares, por lo que da la impresión de que el flamante secretario de Estado de los Estados Unidos, Rex Tillerson, le ha dejado problemas pendientes a su sucesor como máximo responsable de la compañía.
Gran parte de esas reservas perdidas sigue existiendo en términos físicos y están en las arenas petrolíferas de Canadá.
Es por eso que, como señala Exxon en su informe anual 10-k, precios más altos podrían devolver esas reservas a los libros.
Pero, aunque esos barriles físicos están ahí, es evidente que el reemplazo de las reservas, que alguna vez fue un honor para Exxon, se ha convertido en una carga por el costo en reponerlas.
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