El Fondo Monetario Internacional detectó problemas de sostenibilidad en el presupuesto de gasto programable planteado por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para el mediano plazo y recomendó reasignar las erogaciones hacia inversiones de capital y educación.
"Lograr una combinación de gastos más favorable al crecimiento e inclusiva, al tiempo que se hace espacio para los objetivos a mediano plazo de las autoridades requeriría reasignar el gasto hacia el gasto de capital y educación, a la par de mejorar la eficiencia del gasto en todas las áreas", advirtió en las conclusiones de su evaluación sobre la economía nacional conocida como Artículo IV.
En México el gasto social está fragmentado y aunque se han hecho avances para una mejor focalización y reducción de duplicidad de programas asistenciales, el FMI recomendó crear un registro único de beneficiarios para mejorar su eficiencia.
Además, ante la necesidad de mayores ingresos para restar presión a la deuda pública, el gobierno federal tiene espacio para actuar con reformas fiscales y de mejoras administrativas del gasto.
"Los bajos niveles de gasto discrecional implican que aumentar los ingresos será indispensable", expone el documento.