El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió este miércoles que los intentos de reducir déficits comerciales bilaterales subiendo aranceles probablemente serán inútiles y, en cambio, frenarán el crecimiento y causarán pérdidas de empleos.
La evolución de los desequilibrios comerciales durante las últimas dos décadas, hasta 2015, se debió en gran medida a cambios en oferta y demanda, que a su vez se vieron influenciados por factores que incluyeron políticas demográficas y macroeconómicas como impuestos y gasto fiscal, señaló el fondo en un análisis publicado este miércoles.
Los aranceles bilaterales, que ya eran bajos en muchos países, tuvieron un pequeño papel en términos de influir en las balanzas comerciales durante el período de 20 años, explicó el banco sede en Washington en el análisis que acompaña a sus más recientes Perspectivas de la Economía Mundial.
El FMI publicará su informe completo, que incluirá proyecciones de crecimiento actualizadas, el próximo 9 de abril.
La institución señaló que el aumento del gasto de Estados Unidos ha influido en gran medida en el déficit comercial del país, que pasó de 96 mil millones de dólares, en 1995, a 499 mil millones de dólares dos décadas después.
"EU estaba, en conjunto, gastando más de lo que producía, por lo que tuvo que importar más bienes de sus socios comerciales", acotó el fondo.
El informe del organismo no destaca políticas comerciales de ningún país, pero el análisis contrasta con las opiniones del presidente de EU, Donald Trump, quien ha atribuido a prácticas comerciales desleales en países como China el incremento del déficit comercial de la Unión Americana, que el año pasado llegó a su mayor nivel en una década al sumar 622 mil millones de dólares.
Trump ha usado los aranceles a importaciones como método preferido en sus esfuerzos por eliminar la brecha comercial estadounidense. El país ha aplicado gravámenes al acero y al aluminio de socios comerciales como Canadá y México, y puso aranceles por 250 mil millones de dólares a importaciones chinas.
Además, el mandatario estadounidense amenazó con hacer lo propio en el caso de los automóviles fabricados en el extranjero.
El jefe de Estado ha sido especialmente crítico respecto al déficit comercial con China, que alcanzó los 379 mil millones de dólares en 2018.
No obstante, el FMI planteó que apuntar a los déficits comerciales bilaterales probablemente no será efectivo, ya que los países desviarán sus negocios a otros socios comerciales. Aranceles más altos afectarán la producción, el empleo y la productividad, no solo en las naciones directamente involucradas, sino también en otras economías, aseguró el fondo.
"Si bien algunos países pueden beneficiarse de la desviación del comercio, un alza de los aranceles dejaría a la economía mundial en una situación peor", aseveró el FMI.